Un equipo de expertos de las Naciones Unidas han llamado la atención por las operaciones llevadas a cabo en una base administrada por Emiratos Árabes Unidos en el este de Libia.
Según el informe emitido por el equipo de expertos, la base militar de Al-Jadim, administrada por las fuerzas de EAU, cerca de la ciudad de Marj, en el este de Libia, ha experimentado un notable desarrollo durante el período de marzo de 2017 a noviembre del mismo año, según las imágenes de satélite que se adjuntaron en el informe.
El informe confirmó que en aproximadamente ocho meses se ha duplicado el tamaño de la plataforma más meridional de estacionamiento de aviones, gracias a la pavimentación del terreno lateral del aeropuerto que se halla entre dos hangares de mantenimiento.
El informe publicado por Arabi21 también agregaba que se han incrementado el número de puestos de control a la entrada de la base aérea y de los edificios que se consideran parte de los mismos. También ha habido un aumento en el número de vehículos que siempre están ahí estacionados, probablemente asegurando la entrada.
Un sitio web británico especializado en asuntos militares dijo a finales de 2016 que EAU habían establecido una base militar avanzada en la ciudad de Marj (a 100 km al este de Bengasi), desde donde despegaban los aviones ligeros AT-802 y los drones.
La base, que se estableció durante el gobierno del ex presidente libio Muammar Gaddafi, tiene una superficie aproximada de 10 kilómetros cuadrados. Contiene varios aviones, incluidos dos aviones Antonov, aviones de espionaje y aviones de marcha, que se cree que participaron en las operaciones militares contra la ciudad de Bengasi y su Consejo Revolucionario.
Anteriormente, el sitio web británico Middle East Eye reveló una serie de grabaciones filtradas que confirmaban la participación de la Fuerza Aérea de EAU en la realización de ataques aéreos en el este de Libia en apoyo de Haftar contra sus grupos armados rivales.
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Por otro lado, el informe se refería a la visita del mayor general retirado Jalifa Haftar a Túnez en septiembre de 2017, diciendo que tomó un avión Falcon 900, propiedad de una empresa con sede en EAU, llamada Sonning International Group, que está controlada por la empresa Golden Eagle también con sede en Dubai pero registrada en las islas del Caribe holandés.
Según el informe, los miembros de la protección de Haftar estaban fuertemente armados durante su visita al presidente tunecino Beji Caid Essebsi. Un equipo de especialistas analizó las imágenes y videos publicados por la oficina de información de Operación Dignidad y reveló la existencia de unos treinta rifles de carga automática, dos lanzagranadas precisos, más de 30 pistolas de 9 mm y un dispositivo antiexplosivo hecho a mano que estaban montados en el techo del automóvil de Haftar, lo que supone una gran violación del embargo de armas impuesto a Libia.
Emiratos Árabes Unidos pidieron en abril de 2017 que se levantara el embargo de armas impuesto a Libia para facilitar las funciones de lo que describió como "el ejército en la lucha contra el terrorismo", afirmando (Abu Dhabi) que "estar junto a Haftar es una elección correcta que va en línea con el objetivo de la comunidad internacional de la guerra contra el terrorismo". Esto se produjo durante una reunión entre una figura estadounidense de alto perfil con Jalifa Haftar, bajo la mediación de Emiratos Árabes Unidos, en Abu Dabi, durante su visita al país.
Emiratos Árabes Unidos se convirtieron desde principios de 2015 en Libia en partidarios políticos y militares de Haftar, a pesar del hecho de que éste que acogiera con satisfacción el acuerdo de paz alcanzado por las partes libias y que condujo a la formación de un gobierno de unidad nacional.
Haftar, al igual que Mohammed bin Zayed, es conocido por su antagonismo con el Islam político. También es conocido por su extensa historia de golpes de estado, incluido el golpe que llevó a Muammar Gaddafi al poder en Libia en 1969, antes de que después intentara realizar un golpe contra él en más de una ocasión.
Desde que un levantamiento popular derrocara en 2011 al Coronel Muammar Gaddafi, varias facciones armadas han estado luchando en Libia, y tres gobiernos compiten ahora por el poder y la legitimidad.
Dos de estos gobiernos se encuentran en la capital, Trípoli (Oeste), a saber, el Gobierno de Acuerdo Nacional reconocido internacionalmente y el Gobierno de Salvación Nacional, además del gobierno interino en la ciudad de Bayda (Este), que emana de la Cámara de Representantes de Tobruk, afiliado a las fuerzas de Jalifa Haftar.