Empiezan hoy en Khartum, capital de Sudán, nuevas reuniones del comité ministerial tripartito sobre la presa de An Nahda. A las que acudirán los ministros de Asuntos Exteriores y diversos consejeros, técnicos y responsables de los servicios de inteligencia de Sudán, Egipto y Etiopía.
La agencia de noticias oficial sudanesa ha informado de que estas reuniones llegan de las directrices de la cumbre tripartita que reunió a los más altos mandatarios de Sudán, Egipto y Etiopía, en el marco de la última Cumbre Africana celebrada en Addis Abeba.
El objetivo de estas reuniones ministeriales, que se extenderán durante dos días, es fortalecer la cooperación y la coordinación en todas las cuestiones relacionadas con la gestión del agua, el desarrollo social y económico así como las reformas que los tres países están acometiendo.
El portavoz oficial del ministerio de Asuntos Exteriores egipcio, el consejero Ahmad Abu Zeid, confirmó en unas declaraciones efectuadas ayer que estas reuniones intentan dispersar los obstáculos que se presentan ante las negociaciones que tendrán lugar en el marco del comité técnico tripartito. De entre las mismas, una de las más importantes es la aprobación del informe de gestión de la oficina consultiva, ello hasta que se comiencen a preparar en un breve espacio de tiempo los estudios sobre el impacto de la construcción de una presa en los estados de Egipto y Sudán.
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Abu Zeid añadió también: “Lo que es seguro es que Egipto se esforzará en estas reuniones para que quede confirmado el tratado previo suscrito por los mandatarios de los tres países en cuanto a la importancia de respetar la declaración de principios de 2015, especialmente en lo que respecta a la necesidad de completar los estudios requeridos sobre la presa de forma que se evite cualquier posible efecto negativo en los países que están aguas abajo, particularmente Egipto”.
También recordó la aspiración de Egipto de desarrollar la cooperación entre los tres países, ello en vista del gran potencial y las oportunidades que les daría una cooperación estratégica, particularmente en lo que se refiere a la inversión, comercio y cooperación técnica.
El Cairo teme un impacto negativo de la presa que se está construyendo, por si puede repercutir en el caudal de su cuota anual de agua del río Nilo, estipulada en 55.500 millones de metros cúbicos, que es la principal fuente de agua del país. Mientras, Addis Abeba aduce que necesita urgentemente generar electricidad y asegura que la construcción y puesta en funcionamiento de esta presa no será perjudicial para los estados situados aguas abajo, Sudán y Egipto.