El asesor del presidente iraní para asuntos internacionales, Ali Akbar Velayati, ha dicho que las sesiones de la Cumbre de la Liga Árabe "celebrada con una posición central de Arabia Saudí, y bajo la presión que este reino ofrece, carecen de credibilidad desde el punto de vista político e internacional".
La agencia de noticias iraní Tasnim, cercana a Irán, ha informado de que Velayati ha dicho hoy que de acuerdo a su punto de vista "estas conferencias, que se realizan bajo el liderazgo del gobierno saudí, carecen de credibilidad política o internacional. Estados Unidos, Arabia Saudí e Israel han movilizado a los terroristas del mundo para alcanzar sus objetivos ilegales en Siria, pero el pueblo y el “gobierno” sirio son quienes saldrán victoriosos de esta guerra".
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Valayati incidió también en que "esta cumbre árabe no tiene importancia, y el resultado de esta reunión será una declaración final de un gobierno fantoche sin valor".
Y siguió: "En la región hay hoy dos planteamientos. El primero es el de la resistencia y el segundo es el de la negociación. El planteamiento de la resistencia se extiende desde Irán hasta Bagdad, Damasco y Beirut, llegando hasta Palestina. Es un planteamiento victorioso y sus victorias seguirán".
La vigésimo novena sesión de la Cumbre de la Liga Árabe se inauguró en la ciudad oriental saudí de Dhahran el domingo, con la participación de líderes árabes y sus asesores, contando con la presencia de personalidades internacionales.
Arabia Saudí se esfuerza por aglutinar una posición árabe común que rechace cualquier influencia iraní en los países árabes, especialmente en Yemen.
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La cumbre ha sido testigo de la presencia de 16 jefes de estado. Entre los mismos se incluían números presidentes, reyes y príncipes de países árabes, aunque también contó con la destacada ausencia, debida a razones diversas, de 6 jefes de estado. La más notable fue la del emir de Qatar, el Sheikh Tamim Bin Hamad al Thani, que delegó la representación de su país en el representante permanente de Doha en la Liga Árabe, Saif bin Muqaddam al Albuainain.
La cumbre se realiza en el contexto de una crisis del Golfo sin precedentes. Ésta comenzó el 5 de junio cuando Arabia Saudí, los Emiratos Árabes Unidos, Bahréin y Egipto cortaron sus relaciones diplomáticas con Qatar y la impusieron diversas sanciones acusándola de "apoyar el terrorismo".
Arabia Saudí acoge esta cumbre debido a la petición formulada para ello por los Emiratos Árabes Unidos, que debían haber sido los anfitriones de esta 29ª Cumbre. El lugar de realización y la presidencia de estas cumbres se traslada alternativamente de uno a otro de los países miembros de acuerdo al orden alfabético.
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