Aden / Shukri Hussein / Anatolia
El Comité Internacional de la Cruz Roja /Luna Roja (CICR) advirtió el miércoles del peligro de un colapso total de la situación del sistema sanitario dedicado al tratamiento de los pacientes con insuficiencia renal en Yemen.
Esta denuncia se ha producido durante una conferencia de prensa celebrada por la organización en cooperación con el Ministerio de Salud de Yemen, en la capital temporal yemení de Aden.
La organización humanitaria internacional ha denunciado que "la situación sanitaria de los pacientes con problemas de insuficiencia renal está al límite, y es imprescindible que el gobierno yemení y las organizaciones locales e internacionales aceleren su intervención para proteger las vidas de los miles de pacientes necesitados de diálisis y otras coberturas sanitaria".
A la conferencia asistieron Carlos Batas, jefe de la delegación del CICR en Aden, Maria del Pilar, comisionada de salud del CICR, Jamal Khadabakh, director general de la oficina de salud pública de la provincia, y numerosos profesionales del mundo de la salud.
En la conferencia, Carlos Batas denunció que “un 25% de los pacientes con insuficiencia renal en Yemen mueren cada año debido a la falta de tratamiento y al deterioro de la situación general del sistema de salud en este país que lleva sufriendo la guerra desde hace más de tres años”.
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Y añadió: "Nos pareció urgente celebrar esta conferencia de prensa para denunciar el sufrimiento de los pacientes con insuficiencia renal y para movilizar el apoyo a nivel local e internacional para solventar todo lo que sea posible”.
También indicó que miles de yemeníes se enfrentan a la muerte, y que se está apoyando como se puede el funcionamiento de los 32 centros de diálisis del país, distribuidos en 15 de las 23 provincias.
Batas además confirmó que la organización actualmente apoya 6 centros de diálisis en las gobernaciones de Sana'a, Mahweet, Hajjah Norte, Aden y Shabwa Sur.
Y señaló que el apoyo brindado por la Organización a estos centros de diálisis estaba previsto que finalizara en el mes próximo de diciembre.
Según diversas estadísticas previas del Ministerio de Salud en Yemen, el número de pacientes que sufren esta enfermedad, la insuficiencia renal, asciende a 5.000 casos. De éstos, un tercio ha perdido el acceso a la cobertura sanitaria debido al conflicto bélico que existe en el país y a la dificultad para realizar el transporte de pacientes entre las distintas provincias en condiciones seguras.
También recordó que de los 32 centros operativos antes de la guerra han tenido que cerrar cuatro. Y que los 28 que continúan abiertos sufren diversos problemas a la hora de brindar sus servicios como resultado de diversos factores, entre ellos las averías que sufren las máquinas que depuran la sangre, la falta de suministros médicos, el impago de los salarios del personal médico, y otros.
Yemen lleva sufriendo desde hace más de tres años una violenta guerra entre las fuerzas gubernamentales leales al presidente Abd Rabbo Mansour Hadi, apoyadas por una coalición árabe liderada por Arabia Saudí, y las milicias Houthis, apoyadas por Irán, que han partido el país en dos y dejado su situación de cobertura social y humanitaria en una situación extrema.