El presidente libanés Michel Aoun ha dicho: "El Líbano rechaza esperar a que se llegue a una solución política para devolver a la población refugiada siria a su patria, y nos sorprende la posición de algunas de las partes y algunos partidos que obstaculizan este retorno o no colaboran en que se produzca ".
Frente a una delegación extranjera que estaba realizando una visita oficial en el palacio de la República, dijo también: "Libano se enfrenta muchos desafíos debidos a la población refugiada siria en su territorio, que consta de más de 1. 850.000 personas según datos del año 2015".
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El Alto Comisionado de la ONU para la Población Refugiada (UNHCR), organismo encargado de ayudar a la población refugiada y de distribuir asistencia a la misma ha registrado en sus archivos a cerca de un millón de personas en el 2015, pero la población desplazada real es mucho mayor en tanto que mucha gente no se ha registrado en los archivos de este organismo sino del estado libanés. Este número supone aproximadamente el 50% de la población total de El Líbano.
Aoun también ha explicado: "La acogida de tan gran número de población refugiada, si ya es difícil para los países desarrollados, supone una dura carga para el Líbano en lo que supone a su economía, seguridad y capacidad de empleo". "Mientras, la comunidad internacional continúa defendiendo que no regresen a su país, pese a que una pequeña porción de su territorio sea diez veces mayor que la superficie de Líbano y esté “segura”, y vinculan una solución a la cuestión a la solución política”.