El poder judicial de Bahrein ha emitido diversas sentencias condenatorias contra 138 personas acusadas de delitos relacionados con “terrorismo”.
De entre ellas, a 115 les ha sido retirada la nacionalidad bahreiní.
De acuerdo a resoluciones del Cuarto Alto Tribunal Penal, 53 de los acusados han sido condenados a cadena perpetua, otros 3 acusados han sido condenados a 15 años de prisión, 15 han sido condenados a 7 años y 37 han sido condenados a 5 años: a todos ellos, que suman 115 personas, se les ha retirado la nacionalidad bahreiní y se les han confiscado diversas propiedades.
Otras 23 personas han sido declaradas inocentes y han sido liberadas.
Fuentes locales han informado de que el fiscal jefe, Hamad Shaheen, que se ocupa de los delitos de terrorismo en el Cuarto Alto Tribunal Penal, se ha pronunciado hoy sobre la posible formación de un grupo terrorista fuera de la ley llamado “Brigadas Du al Faqaar”, hecho del cual se acusaba a los 138 sospechosos.
El tribunal ha acusado a los condenados de cometer diversos delitos entre los que se cuentan “provocar explosiones, posesión de explosivos, entrenamiento en el uso de armas y explosivos, intento de asesinato de agentes de policía y ataques contra su integridad con fines terroristas, colocación de explosivos simulados en lugares públicos, intentos de contacto con países extranjeros y actuaciones en interés de los mismos para llevar a cabo actos hostiles contra el Reino de Bahrein, intento de crear tumultos y disturbios, la posesión de materiales inflamables, y destrucción de fondos propiedad de terceros”.
El mes pasado, Bahrein retiró la nacionalidad a otros 24 ciudadanos acusados de formar parte de un grupo terrorista chií, de haber sido formados en Iraq e Irán, y de intentar atentar contra miembros de las fuerzas de seguridad.
El poder judicial de Bahrein ha intensificado en los últimos años los procesos judiciales contra personas acusadas de llevar a cabo diversas acciones terroristas, la mayoría de las cuales dirigidas contra policías. Se han dictado numerosas condenas de prisión por diversos periodos y retirado la nacionalidad a muchos de los acusados.
Existe la posibilidad de que la mayoría de estas cuestiones estén relacionadas con las turbulencias que lleva viviendo Bahrein desde 2011 y que han coincidido con el estallido de diversas protestas contra el gobierno por parte de los líderes de la oposición para exigir una monarquía constitucional y reformas políticas.
Las autoridades llevan desde 2011 deteniendo y procesando a sus oponentes, especialmente a personas de confesión chií. También ha ejecutado por fusilamiento a 3 personas y se han dictado otras condenas a muerte, de prisión y de retirada de la nacionalidad. Además están siendo procesados muchos juristas y abogados a los que las autoridades acusan de diversos cargos, entre ellos de “difusión de noticias falsas”.
Organizaciones internacionales de defensa de los derechos humanos acusan a Bahréin de intentar silenciar a los grupos opositores y del encarcelamiento sectario de decenas de disidentes chiíes.