Representantes de la región de Kirkuk, ubicada en el norte de Iraq, han anunciado el miércoles su intención de recurrir ante el Tribunal de Justicia Federal la constitucionalidad de la decisión del Parlamento iraquí de cancelar algunos de los resultados de las elecciones parlamentarias celebradas el 12 de Mayo de este año. Estos parlamentarios pertenecen al partido Unión Patriótica del Kurdistán.
Durante una conferencia de prensa llevada a cabo por estos diputados en el parlamento iraquí en Bagdad, el parlamentario Ribawar Taha explicó: "Nos gustaría señalar que la resolución emitida por el Parlamento de abolir los resultados de las elecciones es una resolución inútil e inconstitucional que excede sus atribuciones en tanto que prescinde e invade competencias del poder judicial. No se puede abolir el derecho a la libertad de voto y de representación y además que eso sea aprobado por el Parlamento".
El parlamentario añadió: "por ello apelaremos la sesión parlamentaria en la que se adoptó esta resolución, y la resolución misma, ante el Tribunal Federal". El parlamentario iraquí invitó también al presidente Fuad Masum a intervenir en esta cuestión como "protector de la Constitución".
Esta polémica surge de la resolución aprobada por el Parlamento iraquí el lunes por la noche de refrendar la decisión de la Comisión Electoral Independiente de volver a contar de forma manual y trasladar a las actas los resultados de al menos el 10% de las urnas, además de no contabilizar los votos de la población iraquí residente en el extranjero y en los campamentos de refugiados existentes dentro de Irak.
La votación desde el extranjero y desde estos campos de población refugiada se contabilizan bajo el epígrafe de "votación condicionada". Ello porque no se requiere que el elector muestre la tarjeta electrónica de elector, tarjeta que se envía previamente a la población, sino que emite su voto mediante una simple comprobación de su identidad.
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La participación en estas elecciones fue del 44.52%, lo que supone un descenso del 17.5% respecto a las anteriores elecciones, celebradas en 2014. Hay que recordar que entre medias Iraq ha vivido momentos convulsos por la aparición y expansión de Daesh, que llegó a ocupar parte del territorio iraquí, y el combate que las milicias kurdas y el estado central hubieron de librar contra esta organización terrorista hasta su derrota total, ocurrida hace apenas unos meses. Fruto de esta situación es ese desplazamiento de población refugiada y la necesidad de su acogida en centros provisionales. Es esta situación provisional la que no ha permitido que se les enviaran esas tarjetas electrónicas.
En estas elecciones "En Movimiento", amplia coalición en que confluyen la corriente que dirige el clérigo Moqtada al Sadr, el Partido Comunista y otros partidos y organizaciones, ha vencido con un resultado de 54 escaños de un total de 329. A continuación quedó la coalición "La Conquista", extensión política de las milicias chiíes de "La Movilización Popular” dirigida por Hadi al Amiri con 47 escaños. Y en tercer lugar la coalición "La Victoria", dirigida por el primer ministro Haider al Abadi, con 42 escaños. La coalición "Estado de la Ley", dirigida por el ex primer ministro, Nuri al Maliki, que gobernó el país de 2006 a 2014, ha obtenido 26 escaños.
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En las provincias kurdas se presentaban dos partidos: el Partido Democrático del Kurdistan, KDP, que ha obtenido 24 escaños y ha sido el más votado en las provincias norteñas de Dohuk y Arbil, y la Unión Patriótica del Kurdistán, UPK, que ha obtenido 15 y ha sido el más votado en las provincias de Kirkuk y Al Suleimaniyah. Los resultados de estas dos formaciones son los que han originado la decisión de cancelar y recontar parte de los resultados por parte del Parlamento Iraquí y la impugnación de esta decisión por parte de sus parlamentarios.
La publicación de los resultados de las elecciones en Iraq se ha producido en medio de una amplia polémica motivada por acusaciones de supuestas operaciones de "fraude".
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