Las autoridades alemanas están estudiando una petición de Irán para retirar 300 millones de euros (unos 353 millones de dólares al cambio actual) de los bancos germanos y transferirlos a Irán. Así lo anunció ayer el diario Bild, citando fuentes gubernamentales sin especificar.
Según Bild, Teherán pretendería retirar estos fondos del Europäische-Iranische Handelsbank (Eihbank), ante el miedo de que este banco se quedara sin efectivo una vez que entren en efecto las últimas sanciones estadounidenses contra el sector financiero iraní.
Washington ha anunciado recientemente nuevas sanciones contra Irán y ha exigido que todos los países dejen de comprar petróleo iraní a más tardar en Noviembre. También ha amenazado a las empresas extranjeras que sigan haciendo negocios con Irán con incluirlas en la lista negra.
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Una de las mayores navieras del mundo, la francesa CMA CGM, anunció el sábado pasado su retirada de Irán, para evitar verse afectada por las sanciones estadounidenses después de que el presidente Donald Trump abandonara en mayo el acuerdo nuclear de 2015.
Según Bild, Teherán habría explicado a la Autoridad Alemana de Supervisión Financiera (BaFin) que necesita el efectivo depositado en Eihbank para suplir las necesidades “de los ciudadanos iraníes que requieren disponer de efectivo en sus viajes al extranjero, debido a la imposibilidad de acceder a tarjetas de crédito reconocidas”.
La petición aún no habría recibido luz verde, informó el periódico, que también agregó que los altos cargos de la Cancillería, y de los Ministerios de Exteriores y Finanzas estarían al corriente de la situación.
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El Ministerio de Finanzas no respondió de inmediato a las peticiones para comentar el caso. Por su parte, el Bundesbank, la BaFin y el Ministerio de Exteriores declinaron hacer declaraciones. Así lo hizo también una portavoz de Eihbank, citando la necesidad de proteger el secreto bancario.
Los ministros de exteriores de los cinco países restantes que habían firmado el acuerdo nuclear – Gran Bretaña, Francia, Alemania, China y Rusia- ofrecieron el viernes pasado un paquete de medidas económicas, que sin embargo Irán calificó de insuficientes.
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