Por lo menos nueve combatientes pro-régimen murieron en un bombardeo nocturno, según informó ayer el Observatorio Sirio de Derechos Humanos.
Israel bombardeó una posición del ejército sirio cerca del aeropuerto de Nairab, a las afueras de Alepo, la madrugada del lunes. Fuentes militares citadas por la agencia estatal siria SANA comentaron que “el enemigo sionista ha atacado una de nuestras posiciones al norte del aeropuerto de Nairab, causando tan sólo daños materiales”. En un principio, no se informó de la existencia de víctimas mortales.
Sin embargo ayer, el Observatorio Sirio de Derechos Humanos, con sede en Londres, contradijo las informaciones iniciales, revelando que al menos nueve personas perdieron la vida en el ataque. El jefe del Observatorio, Rami Abdel Rahman, emitió un comunicado en el que precisaba que seis de los muertos eran de nacionalidad siria, aunque no especificó el origen de los otros tres combatientes.
Abdel Rahman explicó que “los misiles israelíes tenían como objetivo una posición de la Guardia Revolucionaria iraní, cerca del aeropuerto militar de Nairab”. Añadió que se trataba de un centro logístico utilizado para proporcionar equipamiento y alimentos a las fuerzas estacionadas en las inmediaciones, pero que no albergaba armamento.
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La base de Nairab ya había sido relacionada con anterioridad con la Guardia Revolucionaria iraní, que combate en la guerra civil siria en el ando del régimen. La misma posición ya había sido atacada por Israel en Abril.
En los últimos meses, Israel ha llevado a cabo varios ataques aéreos en Siria. La semana pasada, Siria acusó a Israel de haber bombardeado la base T4 cerca de Homs, calificando el acto de agresión y asegurando que las fuerzas aéreas sirias habían obligado a los aviones israelíes a abandonar el espacio aéreo sirio.
Se trataba del tercer ataque a la base T4 en lo que va de año; por lo menos cuatro asesores militares iraníes perdieron la vida en los dos anteriores. Las tensiones entre Israel y el régimen sirio han ido en aumento en los últimos meses, a la par que el presidente sirio recuperaba terreno al sur del país en Quneitra y Daraa, hasta ahora bajo control rebelde. Ambas están situadas dentro o cerca de la zona desmilitarizada que separa Siria de los Altos del Golán, ocupados por Israel. Este mismo mes, Tel Aviv amenazó con ataques preventivos si las fuerzas del régimen penetraban en la zona fronteriza.
Israel ha intervenido en la guerra civil siria en repetidas ocasiones, a pesar de su posición oficial de no implicarse en el conflicto.
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