Al-Shabab tomó ayer por asalto una base militar al sur de Somalia. 27 soldados perdieron la vida en el ataque, según anunció el propio grupo terrorista.
Poco después se produjeron enfrentamientos entre el ejército somalí y la banda armada, en los que murieron 87 combatientes pertenecientes a esta última, según declaró el viceministro de información Aden Isak Ali a la agencia estatal de noticias SONNA.
El mes pasado Al-Shabab ya había atacado la base de Baar Sanguni, a unos 50 kilómetros de la ciudad portuaria de Kismayu. Siete soldados resultaron heridos en esa ocasión.
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El grupo armado está combatiendo contra el ejército somalí con el fin de derrocar al gobierno e imponer su estricta interpretación de la ley islámica. Miles de somalíes y cientos de civiles de África Oriental han caído víctimas de una década de conflicto.
“Primero atacamos la base con un coche bomba y después la asaltamos,” anunció Abdiasis Abu Musab, el portavoz de Al-Shabab para operaciones militares. “Matamos a 27 soldados y tomamos la base. Algunos de los soldados huyeron a la jungla”.
El ejército envió refuerzos a la base después de que se difundiera la información relativa a la explosión y los combates. “El ejército nacional pudo defenderse y matar a 87 combatientes,” subrayó Ali, agregando que habían perseguido al resto de militantes hasta las junglas cercanas.
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