El ministro de información saudí Awad Bin Saleh Alawad advirtió que en una peregrinación destinada al culto y a la oración no hay lugar para la política.
El comentario se produjo durante un encuentro entre el ministro saudí y una delegación de medios de comunicación de varios países árabes, africanos y asiáticos. El fin del encuentro, que tuvo lugar en la oficina del ministro en Jeddah, era debatir la organización del Hajj (la peregrinación a la Meca) de este año, el 1.438 del calendario islámico.
Alawad añadió que todas las instituciones del estado funcionan de acuerdo con un único sistema, con el fin de servir a los peregrinos desde el momento en el que llegan al país y hasta que regresan a sus hogares.
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“Subrayamos con énfasis que el Hajj es únicamente una ceremonia ritual,” aseveró el ministro. “No hay espacio para la politización del Hajj, puesto que se trata de un lugar de culto en el que los musulmanes se unen con unos mismos ropajes, un mismo lugar y un mismo nivel, y no hay diferencias de color o nacionalidad,” agregó, añadiendo que “desde los tiempos del fundador, el Reino desempeña un importante papel al servicio de las dos mezquitas sagradas, y lleva a cabo proyectos gigantescos para guiar a los peregrinos con seguridad y confort”.
El viernes pasado, una portavoz del Ministerio de Exteriores catarí había acusado a Arabia Saudí de obstaculizar el Hajj para los peregrinos cataríes, como parte del boicot de Arabia Saudí a Doha que comenzó en junio de 2018.
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