John Bolton, el asesor de seguridad nacional de la Casa Blanca, se reunió el lunes con el embajador de Turquía en EE.UU. para hablar de la situación del pastor americano Andrew Brunson, detenido en Turquía.
“A petición del embajador turco, el enviado John Bolton se reunió con el embajador Serdar Kilic de Turquía (el lunes) en la Casa Blanca. Hablaron de la continuada detención del pastor Andrew Brunson y del estado de las relaciones entre EE.UU. y Turquía,” anunció la portavoz de la Casa Blanca Sarah Sanders.
Según fuentes del gobierno estadounidense, no se ha fijado un plazo límite para la liberación de Brunson, como habían señalado algunos. Brunson está acusado de apoyar el intento de golpe de estado contra el presidente turco Recep Tayyip Erdogan hace dos años.
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“El hecho de que se estén produciendo conversaciones entre ambos países sobre el regreso de Brunson a EE.UU. es positivo,” valoró Jay Sekulow, un abogado del presidente Donald Trump que también representa a la familia de Brunson. “Espero con ansia el momento en el que la familia Brunson pueda volver a EE.UU,” añadió.
Las relaciones entre ambos miembros de la OTAN se encuentran en crisis, tras haber sido perjudicadas por la detención de Brunson y por la divergencia de intereses en Siria. La semana pasada, Trump ordenó duplicar los aranceles sobre las importaciones de acero y aluminio desde Turquía, contribuyendo así a la caída en picado que está experimentando la lira turca.
El gobierno americano no ha dejado entrever en ningún momento que esté dispuesto a ceder terreno en el caso Brunson, y Trump parece estar dispuesto a mantener la presión económica.
EE.UU. también está estudiando multar a Halkbank, un banco estatal turco, por ayudar supuestamente a Irán a evadir las sanciones estadounidenses. Este mes EE.UU. también impuso sanciones a dos ministros del gabinete de Erdogan.
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