La organización internacional de defensa de los derechos humanos Human Rights Watch ha denunciado que la masacre cometida por la coalición militar dirigida por Arabia Saudí y Emiratos Árabes Unidos en Yemen en la ciudad de Saada debería figurar en un capítulo aparte en la historia de esta guerra plagada de brutalidades.
El bombardeo saudí sobre un convoy en Saada la semana pasada provocó la muere de hasta 40 niños yemeníes y otras decenas de civiles.
Una investigadora de la organización, Stephanie Hancock, declaró: “El incidente supone, con claridad meridiana, una consecuencia más de la guerra que sufre la población civil de Yemen ante la cruel indiferencia de las potencias occidentales que siguen armando a esta coalición con todo entusiasmo”.
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Hancock aclaró que si los principales suministradores de armas estuvieran decididos a conseguir que se minimicen los daños que sufre la población civil lo máximo posible, “este episodio terrible debería considerarse un punto aparte. Se debe detener inmediatamente la venta de armas a Arabia Saudí".
También ha valorado que la respuesta real de la comunidad internacional no ha sido adecuada en vista de la gravedad del ataque saudí, señalando que Estados Unidos, Reino Unido y otros países han vendido miles de millones de dólares de armamento a Arabia Saudí. Mientras, Estados Unidos y Reino Unido no han hecho ningún comentario sobre la venta de armas a la alianza militar liderada por Riad.
Después exigió que estos países bloqueen las ventas de armas a la coalición árabe, bloque militar responsable de múltiples crímenes de guerra en Yemen.
"Pero en vez de eso, el gobierno del Reino Unido ha dicho estar "profundamente preocupado" por las muertes de civiles y el de Estados Unidos ha dicho que la investigación efectuada por los responsables del ataque, la coalición encabezada por Arabia Saudí, sobre el suceso, es suficiente”.
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Se debe señalar que esta misma coalición es la que no ha sido capaz de llevar a cabo investigaciones creíbles de otros presuntos ataques aéreos criminales, y contra las repetidas denuncias de otros sucesos por parte de las Naciones Unidas y otras organizaciones de Derechos Humanos no han encontrado ni siquiera alguna vez evidencias de violaciones de las leyes de la guerra cometidos por sus tropas.
Stephanie Hancock se preguntaba también: ¿Si la muerte de este grupo de menores en un solo día no afecta a nuestras conciencias, que puede afectarlas?
También ha reiterado que su organización ha documentado decenas de ataques aéreos ilegales de la coalición dirigida por Arabia Saudí en los que cientos de civiles en Yemen han sido asesinados, y ha remarcado que el bloqueo que impone sobre parte del país esta coalición ha hecho muy difícil la llegada de una ayuda humanitaria causando “una hambruna catastrófica”.
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