Los diputados iraníes han emprendido medidas para deponer a los ministros de Educación e Industria, aumentando así la presión sobre el presidente Hasán Ruhaní. De acuerdo con fuentes iraníes, docenas de diputados piden la destitución de ambos ministros, acusándoles de tener responsabilidades en el fracaso económico y en la corrupción en el sistema educativo.
El domingo, la Asamblea Consultativa Islámica –también conocida como Majlis- retiró su apoyo al ministro de Asuntos Económicos e Finanzas Masoud Karbasian, en medio de las graves repercusiones económicas de las sanciones impuestas por EE.UU.
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Karbasian perdió el voto de confianza con 137 votos en contra, frente a los 121 a favor, convirtiéndose así en el segundo ministro del Gobierno del presidente Ruhaní que es destituido en lo que va de mes.
33 diputados también firmaron una petición dirigida al presidente de la Asamblea para que Karbasian tenga que dar cuentas de lo que consideran su fracaso a la hora de gestionar la economía y su responsabilidad en la severa crisis económica que azota el país.
La impugnación del ministro de Economía y Finanzas incrementó la presión a la que está sometido el presidente Hasán Ruhaní, duramente criticado por los conservadores por su gestión de la economía bajo las nuevas sanciones de EE.UU.
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