El Tribunal Penal Internacional “continuará desempeñando su labor sin dejarse disuadir” por la amenaza proferidas por EE.UU. de emprender acciones legales contra sus empleados.
El lunes, el asesor de seguridad nacional del presidente Donald Trump, John Bolton, amenazó con imponer sanciones contra los jueces del TPI si el tribunal investiga posibles crímenes de guerra cometidos por EE.UU. en Afganistán.
Bolton advirtió que si el TPI decidía lanzar la investigación, el Gobierno estadounidense estudiaría prohibir la entrada en el país a sus jueces y fiscales, además de imponer sanciones contra los depósitos que pudieran tener en EE.UU. y de emprender contra ellos acciones legales.
En un comunicado, el TPI subrayó que se trata de una institución imparcial e independiente que cuenta con el respaldo de 123 países.
“El TPI, como tribunal de justicia que es, continuará desempeñando su labor sin dejarse disuadir, de acuerdo con estos principios y con la idea global del imperio de la ley,” proseguía el comunicado.
El ministro de Exteriores iraní, Mohammad Javad Zarif, criticó la ausencia de una respuesta internacional a las amenazas de EE.UU. “Estados Unidos amenaza con imponer sanciones contra el TPI e incluso procesar a sus jueces en tribunales americanos. ¿Dónde está la indignación?” escribió en su cuenta de Twitter. “¿Cuándo se decidirá la comunidad internacional a decir que ya basta y a obligar a EE.UU. a comportarse como un estado normal?” agregó.
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