El presidente estadounidense Donald Trump reconoció el martes que aún no se había comunicado con Arabia Saudí en relación con el periodista y disidente que desapareció en Estambul la semana pasada. Trump señaló que sacaría el asunto a colación con Riad “en algún momento”, pero no especificó cuándo tendría lugar esta conversación.
Asimismo, ayer Arabia Saudí invitó por primera vez a testigos turcos a inspeccionar el Consulado para buscar trazas de la desaparición de Jamal Khashoggi. Según fuentes diplomáticas, el Ministerio de Exteriores turco recibió una nota diplomática invitando a sus funcionarios a visitar el edificio en el que el periodista fue visto por última vez.
Khashoggi, que colaboraba como columnista para el diario Washington Post, se desvaneció sin dejar rastro tras entrar en la representación diplomática para obtener documentos personales el pasado 2 de octubre.
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La policía turca, que investiga el caso, anunció el sábado que 15 saudíes, entre ellos varios funcionarios, llegaron a Estambul el día de la desaparición en dos aviones y entraron en el Consulado mientras Khashoggi estaba dentro.
El presidente turco Recep Tayyip Erdogan ha instado a Riad a demostrar que, tal y como defiende, el periodista abandonó el Consulado por su propio pie poco después de entrar.
El martes, el Departamento de Estado de EE.UU. pidió al Gobierno saudí “que efectuara una investigación exhaustiva y transparente”.
“Estados Unidos sigue con preocupación las noticias sobre su paradero. Altos cargos del Departamento de Estado se han comunicado con representantes saudíes a través de canales diplomáticos sobre este particular,” declaró la portavoz del Departamento de Estado Heather Nauert.
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