Un tribunal israelí dictó ayer sentencia en el caso iniciado por un ciudadano de Gaza cuyas tres hijas fueron asesinadas por el ejército israelí durante los ataques que éste lanzó en 2008 contra la Franja. La sentencia rechaza que Israel sea responsable de estas muertes.
Izzeldin Abuelaish, un médico de 63 años de la ciudad de Jabalia, situada en el norte de la Franja de Gaza, perdió a tres hijas y una sobrina por causa de la guerra emprendida por Israel en 2008-2009. Su historia saltó a la fama cuando reveló que sus hijos habían sido asesinados mientras hablaba en directo en un canal de televisión israelí. Su sufrimiento fue así transmitido en directo a todo el país y luego compartido por todo el mundo.
Sus hijas Bissane, de 13 años, Mayar, de 15, y Ayat, de 20, así como su sobrina Nuur, de 14, murieron a consecuencia de un bombardeo ejecutado por el ejército israelí en el marco de la guerra denominada “Operación Plomo Fundido”, que se prolongó durante 22 días.
Leer más: MSF: 1.000 habitantes de Gaza heridos por fuego israelí en riesgo de sufrir una infección grave
Según ha informado el diario The Times of Israel, el tribunal israelí del distrito de Beersheba ha sentenciado ayer que Israel no era responsable de la muerte de las cuatro jóvenes, culpando de esta tragedia a "grupos terroristas [que estaban] combatiendo desde el seno de la población civil y almacenando armas en el edificio donde murieron".
El juez israelí Shlomo Friedlander falló que los proyectiles israelíes golpearon la casa de Abuelaish, ocasionando la muerte de las adolescentes porque "había individuos en el tejado de los que se sospecha que podían actuar como vigías de grupos terroristas y dirigir el fuego contra las fuerzas de las IDF".
Friedlander manifestó que “es lamentable que estas cuatro niñas, que no participaban en los combates, perdieran la vida. Sin embargo, este es un desgraciado efecto secundario de la práctica criminal de las organizaciones terroristas que luchan contra Israel de no salir de en medio de las poblaciones civiles".
Leer más: Irán subvencionará a familias de palestinos asesinados durante las protestas en Gaza
“En el torbellino de la guerra se esperan errores e incidentes," agregó el juez. "Y cuando la guerra se lleva a cabo en medio de una población civil, los errores pueden dañar la vida de los civiles, como lamentablemente sucedió en este caso”.
La demanda de Abuelaish alegaba que en el momento en que su hogar fue bombardeado, por haber individuos desarmados en el tejado de los que el ejército israelí sospechó podían estar avisando con walkie-talkies de sus movimientos, ni siquiera había combates en curso en el área en cuestión, lo que implica que no había ninguna justificación militar para actuar con esta brutalidad. Su equipo de abogados afirma que éste no es sino otro de los crímenes de guerra que Israel acostumbra a cometer contra la población palestina.
Bissane, Mayar, Ayat y Nuur se cuentan entre los 1.390 palestinos asesinados por las fuerzas israelíes durante los 22 días de guerra contra la Franja. El ejército israelí la denominó "Operación Plomo Fundido", aunque en los países árabes fue más conocida como “la Masacre de Gaza”. La organización israelí de defensa de los Derechos Humanos B’Tselem estima que más de la mitad de los muertos eran civiles. Se debe recordar que en ese mismo periodo la respuesta de la resistencia palestina provocó 4 bajas en el bando israelí.
Leer más: Gaza: “No hice nada para dañar a Israel”, lamenta un niño al que disparó un francotirador israelí
En una entrevista con MEMO en 2017, Abuelaish destacó: “Nunca aceptaré que mis hijas sean solo números, es incorrecto llamarlas “daños colaterales”. Son seres humanos, con sus caras y sus nombres”.
Abuelaish explicó también que antes de iniciar este proceso judicial había intentado durante muchos años que el gobierno israelí asumiera la responsabilidad de la muerte de sus hijas “motu propio”. En tanto que este doctor había trabajado como especialista en infertilidad en el hospital de Tel Hashomer, en las afueras de Tel Aviv, intentó utilizar sus conexiones en Israel para lograr el reconocimiento de la culpa de Israel. Pero estos intentos fueron en vano: "Mis llamadas cayeron en oídos sordos, así que me vi obligado a continuar con esto a través de los tribunales", agregó.
La “sentencia” de ayer supone un duro golpe para sus esperanzas de recibir algún reconocimiento de la culpabilidad de Israel en la muerte de sus hijas. Aún no está claro qué va a hacer Abuelaish en adelante, ni si podrá apelar la decisión de este tribunal.
Abuelaish ha anunciado que tiene la intención de donar cualquier compensación otorgada por el tribunal israelí a la Fundación “Hijas por la Vida”. Esta es una organización benéfica que fundó en honor a sus hijas y que fomenta la educación de las niñas de Oriente Medio sin hacer distinción por causa de su condición de israelíes o palestinas, o por causa de su pertenencia a cualquier otra cultura o confesión religiosa.
Leer más: B´Tselem: la mayoría de los manifestantes palestinos heridos en Gaza no estaban cerca de la valla