La Comisión Tunecina de la Verdad y la Dignidad emitió su informe sobre la justicia durante la transición en el país, exigiendo que el actual presidente, Beji Caid Essebsi, se disculpe con el pueblo tunecino por haber sido cómplice de torturas durante el intento de golpe de Estado contra el presidente Habib Bourguiba en 1962.
Según The Guardian, la Comisión afirmó que Essebsi está acusado de complicidad y gestión de arrestos masivos y juicios contra oponentes de Bourguiba después del fallido intento de golpe de Estado.
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La Comisión también acusó a Essebsi de complicidad en la tortura y acusó al ex presidente Zine El Abidine Ben Ali de corrupción.
En su informe de 150 páginas, la Comisión pidió reformas para desmantelar el sistema de corrupción, represión y tiranía dentro de los organismos estatales, con el objetivo de que no se repitan violaciones de los derechos humanos.
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