El presidente francés, Emmanuel Macron, prometió el jueves resistirse al "islam político", que dijo que es una amenaza y busca la secesión de la república, informa Anadolu.
Macron hizo los comentarios durante una conferencia de prensa en el Palacio del Elíseo para desvelar su respuesta política a las protestas de los ‘chalecos amarillos’ tras un debate nacional de tres meses.
"El islam político quiere separarse de nuestra república", dijo, pidiendo al gobierno que sea "intratable" en su contra.
"Estamos hablando de personas que, en nombre de una religión, persiguen un proyecto político", dijo.
Dijo que también debería fortalecerse el control de los fondos del extranjero a algunas organizaciones.
Macron también señaló que la ley de Francia de 1905 sobre el laicismo ha sido efectiva y debería seguir siendo implementada.
“No debemos escondernos cuando hablamos de laicismo. Realmente no hablamos de laicismo. Hablamos sobre el comunitarismo que se ha establecido en ciertos barrios de la república”, dijo, refiriéndose a las comunidades musulmanas en Francia.
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Desde noviembre pasado, miles de manifestantes vistiendo chalecos de color amarillo brillante, llamados los ‘chalecos amarillos’, se han reunido en las principales ciudades francesas para protestar por los polémicos aumentos de Macron de los impuestos al combustible y el deterioro de la situación económica.
Bajo presión, Macron anunció un aumento en el salario mínimo y frenó la subida de los impuestos.
Las protestas se convirtieron en un movimiento más general dirigido a combatir la desigualdad de ingresos, y piden que los ciudadanos tengan una voz más fuerte en la toma de decisiones del gobierno.
Al menos 11 personas murieron en las protestas, alrededor de 8.400 fueron detenidas y más de 2.000 resultaron heridas, y posteriormente casi 1.800 fueron condenadas a prisión.