El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, se ha convertido en un aliado inquebrantable de los principales autores del brutal asesinato de Jamal Khashoggi, el periodista del Washington Post, en los ocho meses desde que ocurrió, dijo el periódico el lunes.
“El señor Trump se ha convertido en un acérrimo defensor de la corte real que envió a un equipo de criminales a asesinar a Khashoggi", dijo el comité editorial del Washington Post en un artículo de opinión.
Chuck Todd asks Trump about holding Saudi Arabia accountable for Jamal Khashoggi's murder, and Trump responds by citing Saudi's billions of $$'s in business with the U.S. pic.twitter.com/o7CgE0nksC
— Brian Stelter (@brianstelter) June 23, 2019
“El asesinato premeditado de un columnista colaborador que creía en la democracia no le concierne, pero el cuidado y la alimentación del reino dictatorial que envió a los asesinos recibe su espléndida atención y su devoción servil. ¿Qué obtiene Estados Unidos a cambio? Complicidad en una guerra criminal en Yemen, y una mancha imborrable en su registro moral", agregó la junta.
La crítica mordaz sigue a la publicación de la semana pasada del informe de la Relatora Especial de la ONU, Agnes Callamard, sobre el asesinato de Khashoggi, en el que determinó que se trataba de una "muerte extrajudicial de la que es responsable el Estado del Reino de Arabia Saudí".
Después de la publicación del informe, Trump dijo que el asesinato de Khashoggi no se produjo durante una llamada telefónica el viernes por la mañana con el príncipe heredero, Mohammad Bin Salman, a quien la CIA determinó con un alto grado de confianza que lo había ordenado.
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Trump y sus principales funcionarios han tratado de proteger a Bin Salman de cualquier responsabilidad por el asesinato del periodista, a pesar de que inicialmente dijeron que habría consecuencias "muy graves" si Arabia Saudí fuera responsable.
En el informe, Callamard, la relatora especial de la ONU sobre ejecuciones extrajudiciales, sumarias o arbitrarias, dijo que encontró "pruebas creíbles" para investigar más la responsabilidad individual de los funcionarios saudíes en el asesinato de Khashoggi, incluido Bin Salman.
Entre sus otras recomendaciones, el informe de la ONU pide que el FBI y el secretario general de la ONU inicien investigaciones criminales sobre el asesinato de Khashoggi, quien era residente de los Estados Unidos.
Cuando se le preguntó durante una entrevista con NBC News el domingo si el FBI debería investigar la muerte de Khashoggi, Trump fue prudente.
"Creo que se ha investigado mucho", dijo.
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Khashoggi fue asesinado y desmembrado por un grupo de agentes saudíes poco después de ingresar al consulado del país en Estambul el 2 de octubre del año pasado.
Riad ofreció varios relatos contradictorios para explicar su desaparición antes de reconocer que fue asesinado en el edificio diplomático, mientras intentaba echarle la culpa de su muerte a una operación fallida llevada a cabo por agentes corruptos.
El cuerpo de Khashoggi no se ha recuperado, y el Reino se ha mantenido en silencio sobre su paradero.
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