Las Naciones Unidas dijeron el jueves que tenían información de que los guardias libios dispararon a refugiados y migrantes que intentaban huir de los ataques aéreos que mataron a al menos 53 personas, incluidos seis niños, en un centro de detención de migrantes, informa Reuters.
Un informe de la Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios de la ONU (OCHA, por sus siglas en inglés) dijo que hubo dos ataques aéreos a última hora del martes, uno que impactó en un garaje desocupado y otro en un hangar que contenía alrededor de 120 refugiados y migrantes.
"Hay informes de que después del primer impacto, algunos refugiados y migrantes fueron atacados por guardias cuando intentaban escapar", dijo el informe de OCHA.
El Ministerio del Interior con sede en Trípoli lo negó rotundamente en una declaración.
Los cuerpos aún estaban siendo recuperados de entre los escombros, dijo el informe, sugiriendo que el número de muertos podría aumentar.
Todavía hay unas 500 personas en el centro de detención en Tajoura, al este de Trípoli, con cuatro nigerianos puestos en libertad para ser enviados a la embajada de Nigeria el jueves y un plan para enviar a 31 mujeres y niños a las instalaciones de salidas de la agencia de refugiados de las Naciones Unidas en Trípoli.
El ministro del Interior, Fathi Ali Bashagha, dijo que el gobierno de Trípoli estaba considerando cerrar todos los centros de detención para migrantes y liberar a los detenidos. Miles de personas se encuentran solas en centros de Trípoli, la capital.
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Libia es uno de los principales puntos de partida para que los migrantes africanos que huyen de la pobreza y la guerra lleguen a Italia en barco, pero muchos son interceptados en el mar y son devueltos por la guardia costera libia, con la aprobación de la Unión Europea.
Los 53 muertos fueron el número más alto declarado públicamente de un ataque aéreo o bombardeo, desde que las fuerzas orientales de Khalifa Haftar lanzaron una ofensiva terrestre y aérea hace tres meses para tomar Trípoli, la base del gobierno internacionalmente reconocido de Libia en el noroeste del país.
"El número de víctimas civiles causadas por el conflicto casi se ha duplicado como resultado de este ataque único", dijo el informe de OCHA, un día después de que los funcionarios de la ONU dijeron que los ataques aéreos podrían haber constituido un crimen de guerra.
Las Naciones Unidas han dicho repetidamente que Libia no es un lugar seguro para que los migrantes rescatados sean enviados de vuelta, y ha pedido que los refugiados y migrantes sean liberados y reciban refugio seguro.
Se negó a criticar directamente a Italia por cerrar sus puertas, pero dijo que los estados europeos deben ayudar a resolver el conflicto en Libia para evitar que las personas emprendan peligrosos viajes por mar.
El centro está cerca de una base militar, donde un ataque aéreo contra las fuerzas del gobierno libio hirió a dos personas el 7 de mayo. A pesar de los riesgos, las autoridades libias continuaron transfiriendo migrantes y refugiados al centro, según el informe de la ONU.
El 12 de mayo, 108 refugiados y migrantes recogidos en el mar por la Guardia Costera de Libia fueron desembarcados y trasladados al centro de detención de Tajoura, agrega el informe.
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