Teherán revivió un proyecto destinado a exportar petróleo de Irán a través de un oleoducto que atraviesa el territorio iraquí hasta el puerto sirio de Baniyas en el Mediterráneo.
Las fuentes revelaron que mediante esta solución, Irán está tratando de eludir las sanciones estadounidenses impuestas y evitar el Estrecho de Ormuz, ya que teme su cierre en caso de cualquier enfrentamiento militar, según la página web iraquí Alsumaria.
Teherán introdujo previamente la idea del proyecto en 2014, pero se detuvo cuando Daesh tomó el control de grandes áreas en el norte y oeste de Iraq, incluido el terreno a través del cual se supone que cruza el oleoducto.
Leer: Rejection of international law on the rise, Iran’s foreign minister says
El proyecto incluye dos fases, concretamente la construcción de un oleoducto de 1.000 kilómetros, aproximadamente la mitad del cual cruza Iraq, y la segunda la unión al oleoducto de Kirkuk-Baniyas, que no ha estado operativa desde 1982 después de que Bagdad cortase lazos con Damasco por apoyar a Teherán durante la guerra entre Irán e Iraq.
La propuesta iraní incluye reparar el oleoducto Kirkuk-Baniyas e Irán asumir el coste total y luego aprovecharlo para exportar, ya que se espera que la capacidad del oleoducto alcance aproximadamente 1,25 millones de barriles por día.
El segundo oleoducto cruzará el eje norte de Iraq a través de las llanuras del Nínive en el norte y entrará en el territorio sirio a través de Deir ez-Zor, llegando a la costa siria. La fuente declaró que Iraq no decidió sobre este asunto.
El Estrecho de Ormuz es uno de los estrechos más importantes del mundo. Más de 20 millones de barriles por día de materias primas y derivados del petróleo cruzan el estrecho, principalmente hacia los mercados asiático y europeo.