El trabajo en el aeropuerto Al Maktoum de Dubai se ha detenido porque las economías de los estados del Golfo están tambaleándose, informó Bloomberg el jueves.
El aeropuerto fue diseñado para ser uno de los más grandes del mundo, con una capacidad anual de más de 250 millones de pasajeros.
Bloomberg citó fuentes, que pidieron no ser identificadas debido a la delicadeza del tema, diciendo que la actividad de construcción se detuvo y las finanzas para la expansión se congelaron hasta nuevo aviso.
Según Bloomberg, la fecha de finalización de la primera fase del aeropuerto, prevista de una inversión de 36 mil millones de dólares que permite a la aerolínea local Emirates consolidar su posición como la aerolínea de larga distancia número uno del mundo, ya se ha retrasado cinco años para 2030 en octubre.
Los aeropuertos de Dubai dijeron en un comunicado a Bloomberg que están revisando su plan a largo plazo y que "los plazos exactos y los detalles de los próximos pasos aún no están finalizados".
La declaración también informó que Dubai Airports dijo que su objetivo es garantizar que el desarrollo aproveche al máximo las tecnologías emergentes, responda a las tendencias y preferencias de los consumidores y optimice la inversión.
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Según Bloomberg, el año pasado la economía de Dubai creció a la tasa más lenta desde 2010, ya que el principal centro comercial del Golfo lidió con las consecuencias de las tensiones geopolíticas y los bajos precios del petróleo.
El turismo se ha estancado desde 2017, mientras que Emirates Airlines permanece en el centro original de Dubai International mientras reflexiona sobre la mejor manera de desarrollar su estrategia.
A la compañía le resulta más difícil agregar nuevas rutas rentables, y está reelaborando sus planes de flota con la cancelación del super-jumbo Airbus SE A380.
El aeropuerto más nuevo, también conocido como Dubai World Central, se inauguró en 2013. La capacidad anual aumentó cinco veces a 26.5 millones de pasajeros el año pasado después del trabajo en la terminal; sin embargo, el número de clientes reales fue de solo 900.000.
Se debía aumentar la capacidad a 130 millones de pasajeros al finalizar la primera fase de expansión. El nuevo diseño planea manejar una capacidad de 260 millones, más del doble del total de clientes de los aeropuertos más activos del mundo en la actualidad.
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