El gobierno de Estados Unidos expresó el domingo su preocupación por las crecientes tensiones en la frontera israelí-libanesa, subrayando su apoyo a Israel y advirtiendo a Hezbolá del Líbano, respaldado por Irán, que se abstenga de adoptar medidas que amenacen la seguridad libanesa, según informa Reuters.
El primer ministro libanés, Saad al-Hariri, llamó el domingo al secretario de Estado de Estados Unidos, Mike Pompeo, después de que Israel y Hezbolá intercambiasen disparos a lo largo de la frontera con el Líbano, dijo la oficina de Hariri.
Un funcionario del Departamento de Estado de los Estados Unidos se negó a hablar sobre cualquier discusión diplomática y agregó: “Somos conscientes de estos informes y estamos preocupados por las crecientes tensiones a lo largo de la frontera. Estados Unidos apoya plenamente el derecho de Israel a la legítima defensa".
Las preocupaciones sobre una nueva guerra entre Israel y el Líbano han estallado en los últimos días después de que dos drones impactasen en los suburbios del sur de Beirut, y se lanzasen misiles antitanque desde el Líbano contra una base del ejército israelí.
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El domingo, el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, dijo que Israel estaba preparado para cualquier situación, pero que evitó su lenguaje generalmente más firme hacia los enemigos de Israel.
El funcionario del Departamento de Estado dijo que Hezbolá debería abstenerse de tomar "medidas hostiles que amenacen la seguridad, estabilidad y soberanía del Líbano", y sugirió que Irán participó en la violencia.
"Éste es otro ejemplo del papel desestabilizador de los representantes iraníes para socavar la paz y la seguridad en la región", dijo el funcionario.