El secretario de Estado de Estados Unidos, Mike Pompeo, se reuniría con el primer ministro israelí Benjamin Netanyahu en Jerusalén el viernes, horas después de que Turquía acordó con Estados Unidos detener su ofensiva contra las fuerzas kurdas en Siria, según informa Reuters.
Turquía lanzó su asalto contra la milicia kurda de las YPG en Siria la semana pasada, después de que el presidente Donald Trump retiró un contingente estadounidense, creando un nuevo frente en la guerra de ocho años en Siria y provocando la huida de 200.000 civiles.
Israel ve a los kurdos de Siria, que alguna vez fueron aliados de Estados Unidos, como un contrapeso para los insurgentes islamistas en el norte de Siria.
Le preocupa que los militantes alineados con su archienemigo Irán puedan llenar el vacío dejado por el desentendimiento de Estados Unidos.
Los kurdos respondieron a la retirada de Estados Unidos invitando a las fuerzas del gobierno sirio, respaldadas por Moscú y Teherán, a pueblos y ciudades en las áreas que controlan.
Leer: Turkish-US delegations meeting on northern Syria ends
El reciente acercamiento diplomático de Trump a Teherán, en paralelo a su despido del asesor de seguridad nacional John Bolton, también dio a los israelíes una pausa.
La tregua del jueves, negociada en Ankara por un equipo estadounidense que incluye a Pompeo y al vicepresidente estadounidense Mike Pence, concede a las fuerzas kurdas cinco días para retirarse de una "zona segura" que Ankara había tratado de capturar.
La visita de Pompeo justo después del alto el fuego fue ampliamente vista en Israel como un intento de calmar las preocupaciones israelíes de que una reducción de la fuerza estadounidense podría exponerlo a los ataques de Irán o sus representantes.
Más tarde el viernes, Pompeo volará a Bruselas para mantener una reunión con el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg.