El secretario de Defensa de Estados Unidos, Mark Esper, dijo el viernes que ninguna tropa estadounidense participará en la aplicación de la llamada zona segura en el norte de Siria y Estados Unidos "continúa nuestra retirada deliberada del noreste de Siria”, según informa Reuters.
El presidente turco, Tayyip Erdogan, dijo el viernes temprano que Turquía establecerá una decena de puestos de observación en el noreste de Siria, e insistió en que una "zona segura" planificada será mucho mayor de lo que los funcionarios estadounidenses dijeron que estaba cubierto por un frágil acuerdo de alto el fuego.
La tregua, anunciada por el vicepresidente estadounidense Mike Pence después de las conversaciones en Ankara con Erdogan, establece una pausa de cinco días para permitir que la milicia FDS liderada por los kurdos se retire de la "zona segura" turca.
El acuerdo tenía como objetivo aliviar una crisis que vio al presidente Donald Trump ordenar una retirada apresurada e inesperada de los Estados Unidos, que según sus críticos equivalía a abandonar a los leales aliados kurdos que lucharon durante años junto a las tropas estadounidenses contra Daesh.
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"Ninguna fuerza terrestre de Estados Unidos participará en la aplicación de la zona segura, sin embargo, nos mantendremos en comunicación tanto con Turquía como con las FDS", dijo Esper a los periodistas, refiriéndose a las Fuerzas Democráticas Sirias (FDS).
Viajará a Oriente Medio y Bruselas en los próximos días para discutir temas que incluyen el futuro de la campaña contra Daesh.
Esper dijo que había hablado con su homólogo turco el viernes y reiteró que Ankara debe cumplir con el acuerdo de alto el fuego y garantizar la seguridad de las personas en áreas controladas por las fuerzas turcas.
“La protección de las minorías religiosas y étnicas en la región sigue siendo un foco para la administración. Este alto el fuego es un paso muy necesario para proteger a las poblaciones vulnerables”, dijo Esper.
Agregó que le recordó al ministro de Defensa turco, Hulusi Akar, la responsabilidad de Turquía de mantener la seguridad de los prisioneros de Daesh en áreas afectadas por la incursión de Turquía.
Un funcionario de defensa de Estados Unidos, que habló bajo condición de anonimato, dijo que Estados Unidos continuaría con la vigilancia aérea en el noreste de Siria para supervisar las prisiones que contienen presuntos militantes de Daesh.