El número de tropas estadounidenses en Siria permanece "estable y sin cambios" tres semanas después del anuncio de retirada por parte del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, dijo el lunes un funcionario estadounidense.
"La decisión de Trump de proteger los campos petroleros en la provincia oriental siria de Deir Ez-Zor ha obligado al Pentágono a enviar refuerzos a esa área en un momento en el que los soldados estadounidenses se alejaban de las áreas cercanas a la frontera sirio-turca", dijo el funcionario a Agence France-Presse (AFP).
El funcionario estadounidense, que habló bajo condición de anonimato, señaló que los refuerzos estadounidenses habían comenzado a llegar a Deir Ez-zor, mientras que algunos soldados fueron enviados al norte de Siria para ayudar a asegurar la retirada de las tropas de esa área. Agregó que otros soldados fueron transferidos de Siria al norte de Iraq.
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"Pero, en general, la cantidad de tropas estadounidenses en Siria es similar a la que había antes del anuncio de la retirada a mediados de octubre", agregó el funcionario, explicando que la cantidad de soldados estaba en "menos de 1.000” mientras que la retirada “continuaba”.
En los últimos meses, Estados Unidos ha anunciado repetidamente la retirada de sus fuerzas militares de Siria, solo para que revelaciones posteriores demuestren que una gran cantidad de tropas permanecen estacionadas en el país, y se espera el despliegue de aún más tropas. Durante las últimas dos semanas, unas 500 fuerzas estadounidenses, junto con convoyes de equipos y vehículos militares, ingresaron a bases en el norte de Siria después de retirarse hace solo unas semanas.
El ejército estadounidense está presente en varias bases y otros puestos militares en Deir Ez-Zor tras expulsar a Daesh de la gobernación en los últimos tres años.