Una coalición naval liderada por Estados Unidos lanzó ayer oficialmente una misión desde su base en Bahréin para proteger el transporte marítimo en la región del Golfo tras una serie de ataques contra barcos y petroleros.
La operación, denominada Sentinel, proporcionará escoltas a los buques comerciales que pasan por las aguas del Golfo, el Estrecho de Ormuz, el Mar de Omán y el Estrecho de Bab El-Mandab en el Mar Rojo.
El comandante del Comando Central de la Fuerza Naval de los Estados Unidos, de la Quinta Flota de los Estados Unidos y de las Fuerzas Marítimas Combinadas, el Vicealmirante Jim Malloy, dijo durante la ceremonia de lanzamiento que "si bien el diseño operativo de Sentinel está basado en amenazas, no amenaza".
“El centro de comando en Bahréin será un punto central para permitir la coordinación de la información recopilada de nuestras marinas y socios en la industria para crear una imagen operativa compartida. Esto informará de las operaciones navales, dirigidas desde este cuartel general”, agregó.
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"Empleamos buques de guerra capaces de patrullar, pero no hay una línea de esfuerzo ofensivo en esta construcción, aparte del compromiso de defenderse mutuamente si son atacados", dijo Malloy.
Estados Unidos ha estado trabajando para formar la coalición desde hace algún tiempo. Sin embargo, muchos países, especialmente los europeos, están preocupados de que la misión arrastre a la región a un conflicto abierto.
Bahréin, la sede de la Quinta Flota de los Estados Unidos, fue la primera en unirse a la coalición en agosto, seguida de Arabia Saudí y los Emiratos Árabes Unidos a mediados de septiembre.
Estados Unidos y los países occidentales han acusado a Irán de lanzar ataques contra petroleros y barcos en aguas del Golfo cerca del estratégico Estrecho de Ormuz desde mayo. Sin embargo, Teherán ha negado repetidamente las acusaciones.