El principal clérigo chiíta de Iraq, el Gran Ayatolá Ali Al-Sistani, pidió el viernes celebrar elecciones parlamentarias anticipadas tras la promulgación de una ley electoral justa y la formación de una comisión electoral independiente.
El representante de Al-Sistani en Karbala, Sheikh Abdul Mahdi Al-Karbalai, citó al líder religioso diciendo: “Hemos indicado en un sermón anterior que las personas son la fuente de las autoridades y de quienes derivan su legitimidad, según lo estipulado por la constitución. Por lo tanto, la forma más cercana y segura de salir de la crisis actual y evitar lo desconocido, el caos o las luchas internas, es regresar a la gente celebrando elecciones anticipadas".
Citando a Al-Sistani, Al-Karbalai explicó que: “Las elecciones anticipadas se celebrarán tras la promulgación de una ley justa que las regule, la formación de una comisión electoral independiente y el establecimiento de un mecanismo de supervisión efectivo, en todas las etapas del trabajo de la comisión, eso restaurará la confianza en el proceso electoral”. Mientras Al-Karbalai criticaba los intentos que obstaculizaban la promulgación de la ley electoral y el agravamiento de las disputas sobre algunos de sus artículos importantes.
Hizo hincapié en la necesidad de acelerar su aprobación, de acuerdo con las aspiraciones de los votantes, teniendo en cuenta la santidad de los votos.
Al-Karbalai también afirmó durante el sermón de oración del viernes que: “Si la ley electoral se aprueba de manera aceptable, las élites intelectuales y las competencias nacionales que desean una acción política deben cumplir su papel en la organización de sus filas, preparando sus programas para el avance del país y la resolución de sus problemas, cada vez mayores, en el marco de planes prácticos estudiados, a fin de estar listos para presentarlo a los votantes en el momento de las elecciones".
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Al-Karbalai expresó su esperanza de que: "No habrá más demoras en la formación del nuevo gobierno, que debe ser un gobierno no controvertido que pueda responder a los requisitos de la etapa actual, con el fin de restaurar el país estado y aplacar la situación". También esperaba que las próximas elecciones fueran: "Celebradas en una atmósfera tranquila, lejos de la perturbación del dinero ilegal o las armas, y libres de intervenciones externas".
La autoridad religiosa de la ciudad iraquí de Najaf, el clérigo chiíta Muqtada Al-Sadr, insistió en que el país hace frente a: "condiciones difíciles y preocupantes, en medio de la continuación de la participación de varios grupos de ciudadanos en manifestaciones pacíficas y sentadas que exigen reformas, mientras algunos de los activistas están sujetos a asesinatos, secuestros y amenazas”.
El llamado de Sistani para acelerar la formación del gobierno interino y la promulgación de la ley electoral se presenta como un preludio a la celebración de elecciones anticipadas, coincidiendo con los esfuerzos de las autoridades y los partidos para ganar más tiempo para postergar el logro de las demandas populares. El presidente Barham Salih no solo extendió el plazo constitucional para nombrar al nuevo primer ministro hasta el próximo domingo, sino que también envió una investigación a la Corte Suprema Federal de Iraq sobre el bloque parlamentario principal, que tiene derecho a nombrar al nuevo primer ministro, en una medida que los activistas consideraron "un nuevo intento de aplazamiento".
Fuentes políticas iraquíes confirmaron que Salih presentó una solicitud a la Corte Suprema Federal de Iraq para definir el bloque más grande en el Parlamento, después de que varios partidos políticos nombraran candidatos para el cargo de primer ministro.
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