El fiscal público de Sudán anunció ayer el inicio de una investigación sobre crímenes cometidos en la región de Darfur por miembros del régimen del ex presidente derrocado Omar Al-Bashir.
"Hemos lanzado una investigación sobre los crímenes cometidos en Darfur desde 2003", dijo Tagelsir Al-Heber a los medios locales, y agregó que la investigación analizaría "casos contra ex funcionarios del régimen de Bashir".
Al-Heber dijo que consideraría "crímenes contra el genocidio y la humanidad", por los cuales la Corte Penal Internacional (CPI) emitió dos órdenes de arresto en 2009 y 2010 contra Bashir.
Señaló que el juicio podría tener lugar fuera de Sudán, lo que genera preocupación por la posibilidad de que Bashir sea extraditado a la CPI en La Haya de Holanda.
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Al-Bashir fue expulsado del poder por los militares en abril, después de meses de protestas populares contra su mandato de 30 años.
Tras su derrocamiento, las autoridades confiscaron siete millones de euros, 351.000 dólares y cinco millones de libras sudanesas de su hogar. Los fiscales lo acusaron de corrupción, posesión de moneda extranjera y de recibir regalos ilegalmente. También está bajo investigación por su papel en el golpe de Estado de 1989 en el que se hizo con el poder.
Desde su expulsión, Al-Bashir ha estado recluido en la prisión de Kober en la capital sudanesa de Jartum.
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