El presidente del Parlamento tunecino Rached Ghannouchi ha dado una lección de democracia y ética a sus oponentes, dijo el sábado el jefe del Movimiento por la Sociedad de la Paz en Argelia, Abderrazak Makri.
En un post en Facebook, Makri habló de una sesión celebrada por el parlamento tunecino el miércoles en la que se acusó a Ghannouchi de llevar a cabo una "diplomacia paralela" para el Estado.
El jefe del mayor partido islámico de Argelia comentó: "Rached Ghannouchi, que pasó toda su vida luchando por las libertades y la democracia, dio una lección a los que solían apoyar el totalitarismo, la opresión y la dictadura en Túnez, y fueron parte de ella".
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"Ghannouchi les dio tiempo para pasar la lista de condenas en el Parlamento que dirige. Luego, soportó pacientemente 20 horas de insultos y falsas acusaciones, con las que, si uno de ellos se hubiera dirigido a sus antiguos amos en Túnez o en algunos países árabes, se habría ausentado para siempre de las cárceles, o incluso podría ser decapitado".
Según Makri: "El jeque Rached fue paciente. Le dio a sus oponentes una lección de la moral de la diferencia."
Ghannouchi, que dirige el Movimiento Ennahda, fue atacado después de felicitar al Primer Ministro libio, respaldado por la ONU, Fayez Al-Sarraj, por la restauración de la base aérea estratégica de Al-Wattia.
Al-Sarraj ha estado luchando contra el general de brigada Khalifa Haftar, respaldado por los Emiratos Árabes Unidos, que lanzó un ataque para capturar la capital libia, Trípoli, hace un año, pero desde entonces ha sufrido grandes pérdidas y se ha visto obligado a retirarse.