El presidente del régimen sirio, Bashar Al-Assad, tiene que cambiar su comportamiento si quiere el apoyo de la UE, dijo ayer el Alto Representante de Política Exterior y vicepresidente de la UE, Josep Borrell.
Hablando durante una conferencia celebrada en Bruselas, Josep dijo: "Sólo después de que [el régimen de Assad] cambie su comportamiento, detenga la represión contra su propio pueblo y se involucre en el proceso político, podremos empezar a hablar de normalización".
Añadió: "Permítanme ser muy claro sobre otra cuestión: existe la tentación de culpar a las sanciones por la terrible situación de la economía siria y las penurias de la gente común de Siria. Puedo hablar de las sanciones de la Unión Europea y recalcar con firmeza que no van dirigidas a la población civil".
"No hay sanciones sobre la ayuda humanitaria ni sobre los suministros médicos. Nuestras sanciones están dirigidas a quienes oprimen al pueblo sirio, bombardean instalaciones sanitarias y escuelas y utilizan armas químicas".
Borrell continuó: "Estamos movilizando el apoyo internacional para la Resolución 2.254 del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, el proceso político dirigido por las Naciones Unidas para resolver el conflicto de Siria".
Según Borrell: "El único camino hacia una paz duradera es a través de las negociaciones intra-sirias lideradas por las Naciones Unidas en Ginebra, no a través de operaciones militares".
El funcionario de la UE saludó la asistencia de la sociedad civil siria a la conferencia que se está celebrando en Bélgica bajo el título "IV Conferencia de Bruselas sobre el apoyo al futuro de Siria y la región". "Nos impresionaron con sus ideas frescas y su deseo de una solución política y el fin de la guerra", dijo, subrayando que "ellos tienen la clave para un futuro pacífico para este país devastado por la guerra".