A la Autoridad Palestina no le gustó escuchar al embajador de EE.UU. en Israel, David Friedman, decir a Israel Hayom que Washington está considerando a Mohammed Dahlan como sustituto del presidente Mahmoud Abbas. Esto tiene sentido según la lógica de que el acuerdo de "paz" de Israel con los Emiratos Árabes Unidos le dará un papel político prominente en la región, incluyendo la cuestión palestina, beneficiándose también de su alianza con Egipto y la luz verde de Arabia Saudita. Los Emiratos Árabes Unidos han estado apoyando a Dahlan durante años, por lo que es probable que juegue un papel en todo esto.
El peligroso cambio en la posición árabe, y no sólo los acuerdos de normalización, son una introducción a un cambio político más audaz en el curso del conflicto con Israel. Con esto, la lógica de la profundidad árabe y todo el vocabulario del arabismo desaparecerá. Como dijo el poeta sirio Muhammad Al-Maghut, todas las naciones duermen y se despiertan en el momento crucial, mientras que la nación árabe duerme en el momento crucial.
Friedman dijo que los actuales líderes palestinos necesitan "unirse al siglo XXI, están en el lado equivocado de la historia en este momento", y este es el resultado realista de la insistencia de los líderes de la AP y de Fatah en aferrarse a un enfoque político que, en opinión de Friedman, no le ha dado un lugar en el siglo XXI.
Esto significa que Friedman no cree que el hecho de que los líderes de la AP y de Al Fatah pasen más de 30 años en un acuerdo político con Israel justifique el establecimiento de un Estado palestino en las fronteras de 1967. Eso es lo que debería haber sucedido hace 22 años según los Acuerdos de Oslo, acordados y firmados por el estado favorito de Friedman, Israel.
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Sus declaraciones reflejan la impresión que la Casa Blanca Trump tiene de Abbas como el hombre de los acuerdos, las conversaciones y Oslo. En ese momento, fue visto por América como el mejor hombre para suceder al Presidente Yasser Arafat. ¿Significa esto que un alto funcionario de EE.UU. está diciendo públicamente que es hora de que otro presidente palestino sea removido y reemplazado, esta vez por Dahlan?
La opinión pública en la Palestina ocupada está por delante de Friedman en este aspecto. Un sondeo de opinión realizado por el Centro Palestino de Investigación de Políticas y Encuestas en la Ribera Occidental y la Franja de Gaza entre el 10 y el 12 de septiembre, mostró que la gran mayoría de los encuestados, el 78%, cree que la cálida acogida de Egipto al acuerdo entre los Emiratos Árabes Unidos e Israel significa que El Cairo ha abandonado oficialmente a Abbas. Eso no es una buena noticia para la AP, Fatah y el líder de la OLP.
El presidente palestino Abbas pone fin a "todos los acuerdos" con Israel, EE.UU. - Caricatura [Sabaaneh/Monitor Medio Oriente]
Esta "venta política" de la AP por la Casa Blanca ofrece a cambio acuerdos financieros sin precedentes, y se acerca a la facción que se ha mantenido en la vía de la resistencia, ganándose el respeto y el progreso político en el proceso. El jefe de la oficina política de Hamas, Ismail Haniyeh, reveló hace un par de meses que su movimiento había rechazado una oferta de los grupos respaldados por las grandes potencias de 15.000 millones de dólares a cambio de desarmar a la resistencia. Unas semanas después se anunció que Jared Kushner, yerno y asesor principal de Trump, había enviado un mensaje a través de terceros en el que manifestaba que estaba dispuesto a sentarse con los dirigentes de Hamas en cualquier lugar que eligieran, ya fuera una capital árabe o europea.
Además, Washington anunció recientemente que comparte la preocupación de Qatar por la situación humanitaria en la Franja de Gaza y la necesidad de adoptar medidas para mejorar las condiciones de vida en esa zona. Entiendo que esto tiene que verse en el contexto de los intentos estadounidenses de aprobar el acuerdo del siglo sin ninguna oposición, pero revela el efecto del poder en el tipo de compromiso regional e internacional que se permitirá. Esto es lo que rige las relaciones internacionales, además de los intereses a los que los acuerdos por sí solos no pueden servir.
Son convicciones que las facciones de la resistencia palestina conocen y a las que se adhieren, y que las han transportado al lado correcto de la historia en el siglo XXI, según los estándares de Friedman. La resistencia aprecia que EE.UU. está tratando de hacer lo que empezó con Fatah, pero esta vez a un precio mayor. Sin embargo, no está en discusión porque se sabe que sirve a los intereses israelíes.
Esto es lo que el presidente Abbas debería darse cuenta, pero no creo que cambie sus convicciones, ya que cree firmemente en el proverbio: "Mejor un huevo hoy que una gallina mañana". Le dijo al CBC de Egipto en 2014 que no cree en los movimientos de resistencia y que no existe tal cosa como un movimiento de resistencia. Al decir esto, ha disminuido la función existencial del pueblo palestino. Aquellos que no aprecian al pueblo, no deben esperar el aprecio de los demás.
Este artículo apareció por primera vez en árabe en Arabi21 el 22 de septiembre de 2020
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