Omán planea introducir un impuesto sobre la renta sin precedentes para los más ricos del país a partir de 2022, dijo el domingo el Ministerio de Economía.
El impuesto es parte de un programa destinado a aliviar la tensión económica causada por la pandemia del coronavirus y hacer frente a un creciente déficit presupuestario causado por los bajos precios del petróleo.
El impuesto previsto, que aún está en estudio, sólo se aplicaría a los mayores ingresos del país, pero el Ministerio de Finanzas de Omán aún no ha especificado los niveles de ingresos.
El Ministerio fue citado por el Oman Observer para dar explicaciones: "Actualmente, el gobierno está evaluando el impuesto y cómo puede ser implementado. El gobierno evaluará el impuesto desde todos los aspectos, incluyendo los impactos sociales, económicos y fiscales, para asegurar un impuesto más eficiente y equitativo para todos".
Los ingresos del impuesto sobre la renta se utilizarán para financiar programas sociales, como se detalla en un plan general publicado el mes pasado, informó Reuters.
La medida no tiene precedentes en Omán, que, al igual que los otros cinco miembros del Consejo de Cooperación del Golfo (CCG), no recauda actualmente el impuesto sobre la renta de las personas físicas.
Los gobiernos ricos de la región se han mantenido alejados de los impuestos sobre la renta durante mucho tiempo porque la libertad económica de la región se ha utilizado para atraer a los inversores, las empresas y la mano de obra, informó Bloomberg.
Sin embargo, desde el accidente petrolero de 2014, Omán, Arabia Saudita y los Emiratos Árabes Unidos se han visto obligados a imponer impuestos sobre el valor añadido (IVA) y a considerar la posibilidad de revisar los generosos subsidios estatales.
Se prevé que la decisión de Omán de imponer un impuesto sobre la renta sea seguida de cerca por los gobiernos de todo el Golfo.
El programa de Omán también planea una importante revisión de los subsidios estatales a los servicios públicos, que le cuestan al país más de 2.500 millones de dólares anuales, según el Oman Observer.
También hay planes para aumentar gradualmente las tarifas de electricidad y agua durante el programa de cuatro años, eliminándolas por completo para 2025, añadió el plan.
Las reformas de los subsidios estatales se centrarán en la reorientación de los fondos sólo para los sectores vulnerables de la comunidad omaní.
El ministerio explicó: "Esta iniciativa pretende reasignar el subsidio a los vulnerables y a las personas que lo merecen.... y [asegurar] que se preste apoyo a las poblaciones vulnerables".
Según las proyecciones del Fondo Monetario Internacional (FMI), la economía de Omán se contraerá un 10% este año, lo que supone la mayor contracción entre los países del CCG.