El ejército libio anunció ayer que la milicia golpista del General Khalifa Haftar lanzó un ataque contra un campamento controlado por el gobierno en la ciudad de Ubari, al sur de Trípoli.
Un portavoz de la Sala de Operaciones de Sirte-Jufra, Abdel Hadi Dara, dijo a la Agencia Anadolu que "una facción de la milicia de Haftar atacó el campamento de Ali Kanna, antes de ser obligada a retirarse por las fuerzas del GNA [Gobierno del Acuerdo Nacional] durante breves enfrentamientos".
El miembro de la Sala de Operaciones de Ubari, Majdi Bouhena, dijo a la Agencia Anadolu: "La fuerza atacante provenía de la ciudad de Sabha y estaba estacionada en la región de Al-Jarma, Ubari".
"Los atacantes están ahora asediando la zona y exigieron que se entregue el campamento", explicó Bouhena.
Subrayó que "ellos [el ejército] no entregarán el campamento y responderán a cualquier nuevo ataque".
Se trata del primer ataque lanzado por la milicia de Haftar contra el campamento de Ali Kanna desde la liberación de la capital, Trípoli, en mayo.
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La ciudad de Ubari, de mayoría tuareg, está controlada por la milicia de Haftar y contiene el yacimiento petrolífero de Sharara, el más grande del país.
El 28 de noviembre, la milicia de Haftar demolió casas civiles en Ubari y secuestró a varios jóvenes, según un comunicado del ejército libio.
La nueva violación del alto el fuego por parte de la milicia de Haftar se produce a pesar de los avances logrados por las partes en conflicto en las negociaciones a nivel militar y político para alcanzar una solución pacífica al sangriento conflicto.
Durante años, el país rico en petróleo ha sido testigo de un conflicto armado, ya que la milicia de Haftar, con el apoyo de los países árabes y occidentales, se opone al gobierno libio por su legitimidad y autoridad, lo que ha provocado muertos y heridos entre la población civil, además de enormes daños materiales.