Es inminente que se produzcan ejecuciones en Irak tras la aprobación por parte del presidente de las condenas a muerte de cientos de presos suníes en respuesta a los atentados suicidas perpetrados en la capital, Bagdad, la semana pasada, ha advertido la Organización Árabe para los Derechos Humanos en el Reino Unido (OADH Reino Unido).
La ejecución de 340 civiles detenidos y encarcelados en virtud del artículo 4 de la Ley de Terrorismo del país se aprobó dos días después de las explosiones de las bombas, en las que murieron 32 personas y cuya autoría fue reivindicada por Daesh.
Tres detenidos fueron ejecutados el pasado lunes en la Prisión Central de Nasiriyah. Según AOHR UK, los condenados procedían de las provincias de Nínive y Anbar. En particular, los tres eran musulmanes suníes, lo que hace temer que su ejecución se base en motivos sectarios.
Muchos ciudadanos, funcionarios y milicias chiíes de Irak consideran que grupos terroristas como Daesh son sinónimo de población suní. Esto ha llevado a la persecución sectaria de civiles suníes por sospecha de afiliación a dichos grupos.
En un comunicado de prensa emitido ayer, la OADH Reino Unido afirmó que, aunque los "atentados criminales" debían ser condenados, "no pueden utilizarse como pretexto para ejecuciones aleatorias y extrajudiciales de detenidos inocentes, especialmente después de haber sido juzgados en juicios injustos".
La ley en virtud de la cual se detuvo a los 340 detenidos -todos ellos, al parecer, suníes-, dijo la OADH, "es utilizada por el régimen iraquí para perseguir y matar a sus opositores, así como para crear conflictos sectarios."
VIDEO: Doble atentado suicida en el centro de Bagdad
Según uno de los abogados de los acusados, "las detenciones y los cargos se basaron en informes secretos y malintencionados de informantes y a pesar de que la mayoría de los detenidos proceden de diferentes zonas y gobernaciones y no tienen ninguna relación entre sí. Se les ha relacionado con estos casos... sin ninguna prueba".
El abogado también criticó el trato dado a los detenidos. "Fueron torturados gravemente a manos de los servicios de seguridad en cárceles secretas, donde muchos de ellos permanecen privados de comunicación con sus familias". En algunos casos, añadió, se filtran fotos de los detenidos para chantajear a las familias para que paguen dinero a los agentes de seguridad para que los liberen.
AOHR UK acusó al gobierno iraquí del primer ministro Mustafa Al-Kadhimi de "avanzar en la dirección equivocada" a pesar de sus promesas de reforma tras su nombramiento el año pasado.
Los verdaderos autores de la explosión suicida no están ni en prisión ni en el corredor de la muerte, insistió la organización. "Están libres y tienen más oportunidades de llevar a cabo otros atentados terroristas, ya que el gobierno hace la vista gorda ante sus violaciones y condena a inocentes tras juicios falsos que carecen de toda prueba".
La AOHR Reino Unido pidió a las organizaciones de derechos humanos y a la comunidad internacional que intervengan inmediatamente y tomen las medidas necesarias para presionar al régimen iraquí para que detenga las ejecuciones. "El terrorismo sólo puede combatirse protegiendo los derechos humanos y respetando el Estado de Derecho, no con la violación de los derechos humanos y la politización del poder judicial".