Bahréin, Kuwait y los Emiratos Árabes Unidos (EAU) han apoyado este sábado a Arabia Saudí en su rechazo a un informe de la CIA sobre el asesinato del periodista Jamal Khashoggi, según informa la Agencia Anadolu.
La medida se produjo un día después de que la CIA publicara un informe no clasificado que culpaba al príncipe heredero saudí Mohammed bin Salman, del asesinato en 2018 del columnista del Washington Post Jamal Khashoggi, en Estambul.
El informe concluyó que bin Salman aprobó "capturar o matar" a Khashoggi al considerarlo una "amenaza para el reino" y también aprobó el uso de medidas violentas si era necesario para silenciarlo.
El Ministerio de Asuntos Exteriores saudí emitió un comunicado en el que rechazaba el informe, calificándolo de "negativo, falso e inaceptable", añadiendo que contenía "información y conclusiones inexactas".
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, tiene previsto hacer un anuncio sobre el informe y las relaciones con Arabia Saudí hoy lunes.
En un comunicado, el Ministerio de Asuntos Exteriores bahreiní respaldó el rechazo saudí al informe, señalando el "papel central" que desempeña Arabia Saudí en asuntos regionales e internacionales.
El Ministerio de Asuntos Exteriores kuwaití, por su parte, alabó el papel del reino en la lucha contra "la violencia y el extremismo y su incesante apoyo a la seguridad y la estabilidad en la región y en todo el mundo".
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Los Emiratos Árabes Unidos también defendieron a Arabia Saudí, expresando su confianza en el poder judicial del reino y en su "compromiso de aplicar la ley de forma transparente e imparcial, y de exigir responsabilidades a todos los implicados en este caso".
El jefe de la Organización de Cooperación Islámica (OCI), Yousef bin Ahmad Al-Othaimeen, también expresó su apoyo a la declaración saudí.
Según un informe de la agencia de noticias saudí SPA, Al-Othaimeen dijo que rechaza las "deducciones inexactas citadas en el informe, que no tiene pruebas decisivas".
Al-Othaimeen dijo que apoya todas las medidas judiciales que se han tomado contra los culpables del crimen y contra los que ya se han emitido veredictos.
Khashoggi fue brutalmente asesinado y probablemente desmembrado en el interior del consulado saudí en Estambul en octubre de 2018, y aunque los funcionarios saudíes negaron inicialmente cualquier papel en su muerte, más tarde trataron de culpar a lo que dijeron que era una operación de entrega fallida.
El ex presidente de Estados Unidos, Donald Trump, trató constantemente de proteger al líder saudí de las repercusiones en medio de una protesta bipartidista generalizada, bloqueando la publicación del informe de la CIA.