El Reino Unido aumentará su capacidad de disuasión nuclear en un 40% en respuesta a la "evolución del entorno de seguridad", según una revisión publicada el martes.
El documento de 114 páginas, titulado "Global Britain in a competitive age" (Una Gran Bretaña global en una era competitiva), revela los planes de aumentar el límite de su arsenal de cabezas nucleares de 180 a 260.
"La revisión integrada de la seguridad, la defensa, el desarrollo y la política exterior" identifica a Rusia como la "amenaza más aguda" para la seguridad del país.
El primer ministro, Boris Johnson, dijo en una declaración en la Cámara de los Comunes que crearán un nuevo centro de operaciones antiterroristas para combinar la capacidad de "frustrar los designios de los terroristas, al tiempo que se hace frente a las acciones de los estados hostiles".
"Hace casi exactamente tres años que el Estado ruso utilizó un arma química en Salisbury, matando a una madre inocente, Dawn Sturgess, y llevando el miedo a una ciudad tranquila", dijo.
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Johnson se refería a una serie de presuntos ataques con el agente nervioso Novichok, que hirieron a un ex espía ruso y a su hija, a un oficial de policía, y mataron a una mujer, e hirieron gravemente a otro hombre en el Reino Unido en 2018.
El documento dijo que el país cambiará su enfoque hacia los países del Indo-Pacífico, que describió como el "motor de crecimiento" del mundo.
"No hay duda de que China supondrá un gran desafío para una sociedad abierta como la nuestra", dijo Johnson a los legisladores.
"Pero también trabajaremos con China cuando eso sea coherente con nuestros valores e intereses, incluyendo la construcción de una relación económica más fuerte y positiva y en la lucha contra el cambio climático".
Sin embargo, algunos diputados de la oposición, entre ellos el líder del Partido Laborista, Keir Starmer, criticaron el enfoque de China.
El ex secretario de Defensa Michael Fallon, en el compartimento de almacenamiento de armas a bordo del HMS Vigilant en la Base Naval de Su Majestad, Clyde el 21 de enero de 2016 en Rhu, Escocia. [Jeff J Mitchell/Getty Images]
Tobias Ellwood, presidente conservador de la comisión de defensa, dijo que esperaba que el gobierno se enfrentara a China.
"Debo decir que creo que hay que encontrar un equilibrio porque, después de todo, tenemos una fuerte relación comercial con China por valor de unos 81.000 millones de libras [112.500 millones de dólares], China es la segunda economía del mundo y un hecho en nuestras vidas", respondió Johnson.
Dijo que el ministro de Asuntos Exteriores, Dominic Raab, ha hecho "más que creo que prácticamente cualquier otro ministro de Asuntos Exteriores del mundo para llamar la atención sobre lo que China está haciendo en Xinjiang y por eso este gobierno ha ofrecido un lugar, un refugio y una morada, a tres millones de chinos de Hong Kong que pueden tener miedo a la persecución como resultado de lo que está sucediendo en Hong Kong".
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Según el documento, el Reino Unido aspira a convertirse en una "superpotencia científica y tecnológica" para finales de la década.
La revisión también dijo que el terrorismo seguirá siendo un desafío principal, señalando que un ataque químico, biológico, radiológico o nuclear es probable en la próxima década.
"Existe una posibilidad realista de que aumente el patrocinio estatal del terrorismo así como la utilización de agentes indirectos", decía.
"Es probable que un grupo terrorista lance un ataque QBRN con éxito para 2030".
La revisión también dice que Estados Unidos seguirá siendo el aliado y socio estratégico más importante del Reino Unido, y añade que Alemania, Irlanda, Italia y Polonia también son socios estratégicos.
Del mismo modo, trabajamos con otros socios europeos como España, Portugal, Países Bajos, Dinamarca, Noruega, Suecia, Suiza y Turquía en un conjunto de intereses centrados en los que podemos encontrar una causa común, como los valores, el libre comercio y el compromiso del transatlántico, añade el documento.
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