Las autoridades israelíes siguen prohibiendo a Laith Abu Zeyad, activista palestino de derechos humanos y activista de Amnistía Internacional, viajar a Jerusalén Oriental o al extranjero, informó ayer Rai Al-Youm.
El Tribunal de Distrito israelí de Jerusalén tiene previsto celebrar una vista el 6 de abril para responder a la nueva petición presentada por Amnistía contra la prohibición de viajar de Abu Zeyad.
Según Amnistía Internacional, las autoridades israelíes han prohibido a Abu Zeyad viajar al extranjero desde octubre de 2019 por "motivos de seguridad" no especificados.
En febrero se desestimó una primera petición presentada contra la prohibición de viajar de Abu Zeyad y se presentó una nueva petición para anular la "cruel" prohibición de viajar impuesta por las autoridades israelíes a uno de sus miembros del personal, un activista y palestino que vive en la Cisjordania ocupada.
Amnistía Internacional señaló que Abu Zeyad solicitó un permiso humanitario en el puesto de control militar de Al Zaytoona (Hazatem), cerca de Jerusalén, en septiembre de 2019, para acompañar a su madre a recibir tratamiento médico en Jerusalén.
Su solicitud fue denegada el mismo día basándose en "razones de seguridad" sin más explicaciones.
En diciembre de 2019, a Abu Zeyad se le prohibió visitar a su madre, que padecía cáncer, en un hospital cercano de Jerusalén y, como resultado, no tuvo la oportunidad de verla antes de su muerte.
En mayo de 2020, un juez del Tribunal de Distrito de Jerusalén atendió la petición de Amnistía de que se levantara la prohibición ilegal de viajar contra Abu Zeyad, pero aceptó la afirmación infundada de la Agencia de Seguridad de Israel de que era un riesgo para la seguridad, con lo que se ratificó la prohibición. Se le denegó un permiso especial para asistir a la vista, pero estuvo representado por su abogado, Tamir Blank.
La información que las autoridades proporcionaron al tribunal contra él se mantuvo en secreto y no pudo ser impugnada.
Su abogado y los observadores de Amnistía Internacional y de las misiones diplomáticas tuvieron que abandonar la sala cuando las autoridades presentaron la información secreta al juez. Esto significa que Abu Zayed no podrá recurrir la decisión.