El Consejo Supremo Palestino de la Fatwa advirtió el domingo de la demolición israelí del suburbio de Al-Bustan, en el barrio jerosolimitano de Silwan, informó la Agencia de Noticias Sama.
Tras una reunión encabezada por el Gran Mufti de Jerusalén, Muhammad Hussein, el consejo anunció que esta demolición está provocando el desplazamiento de decenas de familias palestinas en aras de la construcción de instalaciones judías.
"Se trata de un peligroso precedente en la historia de Jerusalén", afirmaba un comunicado del Consejo de la Fatwa, añadiendo: "Es el comienzo de un enfoque que incluye la demolición de barrios completos y la deportación colectiva".
Según el consejo: "Esta medida, cuyo objetivo es expulsar a los indígenas de su tierra, es un plan para evacuar la parte sur de la mezquita de Al-Aqsa para garantizar que no haya un escudo humano que proteja la mezquita".
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En la declaración, el consejo dijo que las autoridades de ocupación israelíes también tienen como objetivo los cementerios palestinos de la zona, junto con las viviendas palestinas.
"Esta medida coincide con las escaladas provocadoras de los colonos judíos israelíes que llevan a cabo diariamente la profanación del lugar sagrado musulmán", confirmó el comunicado.
Mientras tanto, el muftí advirtió de la explotación por parte de Israel del cierre por la COVID-19 para intensificar sus planes de judaización y sus esfuerzos por socavar los cimientos de la mezquita de Al-Aqsa.
El muftí también condenó la demolición israelí de la aldea de Al-Mayta, en el norte del Valle del Jordán ocupado, y la describió como una forma de agresión israelí en tierras palestinas.
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