Las autoridades de ocupación israelíes han impedido a miles de fieles palestinos de la Cisjordania ocupada entrar en la mezquita de Al-Aqsa el primer viernes del mes sagrado musulmán del Ramadán, según ha informado Arab48.
Según el sitio web de noticias, las autoridades israelíes pusieron como condición que los fieles de los territorios ocupados se vacunaran contra el COVID-19 para poder acceder al lugar sagrado musulmán.
Mientras tanto, los territorios ocupados de Cisjordania y la Franja de Gaza no disponen de cantidades suficientes de vacunas, por lo que miles de personas se vieron privadas de realizar la primera oración del viernes en la mezquita de Al-Aqsa.
Los puestos de control militares israelíes entre Cisjordania e Israel han sufrido graves congestiones, informó la Agencia Anadolu, señalando que se produjeron disputas entre los palestinos y las fuerzas de ocupación israelíes en el puesto de control de Qalandia.
"Se nos impidió entrar en la mezquita de Al-Aqsa con el pretexto de no estar vacunados", dijo Samia Abdul-Aziz a la Agencia Anadolu. "Sin embargo", argumentó, "pretenden reducir el número de fieles musulmanes dentro de los patios sagrados".
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