La agencia nacional de inteligencia de Israel (Mossad), es conocida por cruzar todas las líneas rojas para lograr sus objetivos, utiliza todos los métodos que garantizan ganancias políticas, militares y de seguridad para Israel, es considerada como la punta de lanza de Israel en los crímenes y la normalización, también juega un papel importante en la política exterior a la sombra de Israel. A nadie se le oculta la historia negra de esta agencia desde su creación por el primer Primer Ministro israelí David Ben-Gurion. Las investigaciones llevadas a cabo en muchos países árabes y extranjeros han demostrado su conexión con un gran número de asesinatos a científicos, estudiantes, periodistas, artistas y otras personas de diferentes nacionalidades árabes y extranjeras.
La historia también da testimonio de esta agencia en su reclutamiento de jóvenes palestinos y árabes de todo el mundo para que trabajen con ella en la implementación de objetivos políticos y de seguridad en los asesinatos de personas que trabajan contra Israel. Uno de los más importantes fue el asesinato del caricaturista Naji Al-Ali, asesinado por un joven palestino en la capital británica, Londres.
Una investigación de prensa llevada a cabo por el periodista palestino Muath Hamed en 2019 confirmó que el Mossad está trabajando para reclutar a jóvenes palestinos en Turquía a través de instituciones falsas ubicadas en países de Europa. Sin embargo, este informe fue el motivo de la llegada del Mossad a Muath en España, país en el que vive como refugiado. El Mossad violó todas las normas, la moral y las leyes, al interrogar a Muath, con la coordinación de la Guardia de Seguridad española, dentro de una de sus sedes en Madrid.
En esta entrevista con el periodista Muath Hamed, que trabaja como reportero para la televisión árabe en España y como periodista de investigación en varias páginas web, conoceremos todos los detalles del reportaje que publicó y del interrogatorio al que fue sometido por un oficial israelí del Mossad en España.
En primer lugar, explíquenos la naturaleza del informe que ha publicado
Hace un año y medio publiqué una investigación de prensa en el periódico Al-Araby Al-Jadeed sobre la naturaleza del trabajo del Mossad israelí y su intento de reclutar a jóvenes palestinos en Turquía a través de instituciones falsas situadas en países europeos como Bélgica y Holanda. Estas instituciones son utilizadas como frentes para el reclutamiento indirecto de jóvenes palestinos engañándolos con que estas instituciones trabajan en interés de la causa palestina y del trabajo palestino en general. Estas instituciones solicitan a estos jóvenes palestinos informes de prensa y vídeos sobre trabajos concretos, y luego les transfieren dinero a cambio, ya que se aprovechan de la necesidad de dinero de los jóvenes. Pero en mi investigación periodística demostré que estas instituciones son instituciones afiliadas al Mossad israelí rastreando las transferencias de dinero a través de Money Gram y Western Union desde países como Rumanía y Georgia, también rastreando los correos electrónicos privados que se utilizaban para comunicarse con estos jóvenes. Por supuesto, todos los correos electrónicos que se enviaban lo hacían a través de una VPN, pero lo que pude descubrir durante mi investigación fue que en uno de los correos no se utilizó una VPN en el remitente, por lo que llegamos a través de este correo electrónico a descubrir que el lugar es el centro de inteligencia israelí en Tel Aviv. Preparé esta investigación mientras vivía en Turquía, pero no me atreví a publicarla antes de viajar a España y solicitar asilo allí, por miedo a mi propia vida.
¿Puede explicarnos cómo fue citado para ser investigado? ¿Qué le ocurrió dentro de la sala de interrogatorios? ¿Le comunicaron de antemano el motivo de la citación?
La primera citación tuvo lugar por teléfono. Una persona que se identificó como miembro de la Guardia de Seguridad española me llamó y pidió reunirse conmigo en la sede de la Guardia de Seguridad en Bilbao, que es la ciudad en la que vivo, y me dijo que el propósito de la entrevista era completar mi solicitud de asilo, aunque la Guardia de Seguridad no es la encargada en temas de asilo, pero consulté a mi abogado, me aconsejó que fuera y llevara todos los papeles relacionados con mi expediente de asilo. Finalmente fui y resultó ser una reunión normal, pero hay algunas preguntas que me hizo el investigador que despertaron mi asombro. Me preguntó qué haría si me encontrara con el embajador de Israel en España. Le dije que soy periodista y que no podía exponerme a él en absoluto, así que me preguntó que si me encontraba con el oficial de inteligencia israelí de la embajada israelí, ¿qué haría? Le contesté que cómo iba a saber que se trataba de un oficial de inteligencia. En cualquier caso, no haría nada contra él, pero estoy convencido, después de lo que me ocurrió, de que quería asegurarse de que no le haría nada al oficial si me lo encontrara cara a cara. Al cabo de un tiempo me volvieron a llamar por teléfono y la persona que llamaba me dijo que me necesitaban para otra entrevista, pero les dije que estaba muy ocupado y que no podía ir, la tercera vez me llamaron por teléfono también y me dijeron que había expedientes importantes pendientes en el expediente de solicitud de asilo, y que necesitaban aclaraciones adicionales para una serie de cuestiones, y me pidieron que fuera a Madrid el 11 de febrero de 2021.Fui a la entrevista, y nada más llegar a la sede de la Guardia de Seguridad, inmediatamente vi al funcionario que se sentó conmigo por primera vez en el Centro de la Guardia de Seguridad de Bilbao, se llamaba Javier, estaba acompañado por otra persona con uniforme diplomático. Inmediatamente descubrí que lo que tenía delante era un oficial de la inteligencia israelí, por mi experiencia previa tratando con este tema, pero no tenía ninguna prueba.
El oficial español, Javier, me presentó a la persona que llevaba uniforme como un oficial de inteligencia belga, pero en cuanto este oficial me habló en árabe, tuve la certeza de que era del Mossad, rápidamente le hablé en hebreo y le pregunté si hablaba hebreo. Los dos hombres se confundieron inmediatamente, y noté que el oficial español estaba más confundido y abandonó la entrevista directamente, el oficial de inteligencia israelí se quedó conmigo durante una hora y media. La investigación fue toda en árabe y el oficial me admitió que era de la inteligencia israelí, me preguntó sobre todo por mi viaje desde que viajé desde Palestina hasta que entré en España y presenté mis papeles para el asilo, pasando por mi estancia en Turquía, donde estuve 4 años, el oficial español no entró para nada hasta un cuarto de hora antes de terminar la investigación. Durante el interrogatorio, fui amenazado directamente de no volver a Palestina y me aseguró que sería mejor para mí quedarme en España, y si volviera, mi vida podría estar en peligro. Inmediatamente recordé el momento en que los soldados de ocupación israelíes me apuntaron directamente durante mi cobertura de prensa en un evento en la Palestina ocupada, en el que fui herido moderadamente. Volviendo al interrogatorio en Madrid, en lo que más se centró el investigador israelí fue en la investigación periodística que preparé, quería saber las fuentes que me ayudaron en ella, también quería que le revelara las fuentes de información dentro de la misma, y quería saber cómo pude descubrir que era un oficial israelí, y cómo pude llegar a todo lo que llegué dentro de mi investigación periodística, creo que el objetivo de la pesquisa era un aparente intento de estudiar el fracaso de lo ocurrido para evitar cualquier otro fracaso en el futuro. Por supuesto, me negué a revelar ninguna de mis fuentes, y al final de la entrevista el oficial israelí me pidió que me reuniese en futuras sesiones con el oficial español Javier, esto podría significar un intento de reclutamiento para trabajar con el Mossad israelí. Lo que más me llamó la atención y me asustó durante la investigación, y francamente, me aterrorizó es que este oficial israelí conocía todos los detalles de mi vida dentro de España, así como conocía los detalles más precisos sobre mi expediente de asilo, mi dirección residencial, el tipo de coche que conduzco y cuándo y dónde trabajo, esto indicaba que había un estrecho seguimiento de mis actividades en España.¿Cuál crees que es la gravedad y la importancia de lo que te ocurrió?, tanto a nivel de seguridad como a nivel profesional y mediático.
Por supuesto, lo que me ha ocurrido es muy peligroso, parece que en los servicios de inteligencia europeos se sabe que no hay líneas rojas, y ahí radica el peligro de que al hacerlo podamos decir que la inteligencia europea está trabajando como agente exclusivo de la inteligencia israelí para ayudarles a reclutar a los jóvenes palestinos que vienen a Europa por migración o asilo para convertirse en espías o agentes de una u otra manera. Además, la gravedad de lo sucedido radica en la explotación de los jóvenes y su necesidad material para reclutarlos, esto lleva a una clara violación de todas las normas europeas e internacionales que contemplan la protección de los refugiados, además de un intento de emplear a una persona que vive bajo ocupación en beneficio del propio ocupante, por supuesto esto es malo, peligroso, inmoral e ilegal también.
Lo que me pasó a mí también le ha sucedido a muchos jóvenes palestinos en Europa y otros países, y es bien conocido entre los palestinos, pero la juventud palestina en general carece de conciencia, y tienen miedo de revelar lo que les sucedió, pero se puede decir que esta es la primera vez que un periodista expone este tema. Tal vez sea el primer periodista que se expone a un suceso de este tipo y que habla de ello y emprende acciones legales, porque lo que me ocurrió rompe todas las reglas del trabajo periodístico a nivel profesional, porque sabemos que Europa defiende el trabajo periodístico y defiende las fuentes de información, pero con respecto a lo que me ocurrió, hubo una clara falta de respeto al periodismo y una claro aprovechamiento de que soy un periodista refugiado, extranjero y no soy ciudadano con plenos derechos.¿Siente preocupación por su vida después de a lo que ha sido expuesto? ¿Puede soportar su trabajo en los medios de comunicación?
Francamente, la ansiedad está muy presente, pero ahora estoy tratando de estar atento y consciente de todos los pasos que doy, también de todas mis experiencias, y he llegado a contabilizar plenamente cada paso, también me he vuelto más atento en todos los lugares a los que voy y en los caminos que tomo. Ahora miro mucho a las personas, desconfío de cualquiera, incluso si veo a alguien dos veces en un día dudo de él o ella, puedo decir que tengo ansiedad a nivel personal. También tengo ansiedad y miedo por parte de la guardia de seguridad española, de que puedan vengarse de mí, puedan poner en peligro mi vida personal matándome o intentando vengarse de mí poniendo cargos falsos contra mi. También lo que me pasó podría ser utilizado para interrumpir el papeleo de mi solicitud de asilo. Pienso seriamente que me equivoqué en la elección de país correcto para el asilo, ahora estoy pensando seriamente en salir de España si no responden a mi solicitud de asilo, e ir a otro país europeo que me respete más.
¿Tiene algún mensaje para los profesionales de los medios de comunicación árabes y palestinos en Europa y Occidente en general?
El mensaje más importante que envío a los profesionales de los medios de comunicación árabes en general y a los palestinos en particular es que la conciencia de la seguridad es muy importante para cualquier periodista, y nosotros, como palestinos, estamos obligados a tener cuidado porque nuestra profesión y nuestra causa nos lo exigen en gran medida. Cualquier citación de la agencia de seguridad no debe hacerse por teléfono, sino que debe hacerse a través de una carta oficial que llegue a casa, también no podemos dar ningún paso sin consultar a un abogado, e incluso que el abogado pueda hacer un seguimiento de todos los papeles en los departamentos oficiales y gubernamentales. Además, debemos conocer todos los derechos legales para no confundirnos ni ser explotados por ninguna institución gubernamental.