Un solicitante de asilo kurdo de Irán se prendió fuego ayer frente a la oficina de la ONU en la ciudad kurda de Irak, Erbil.
Behzad Mahmoudi, de 25 años, protestaba contra las duras condiciones económicas y de vida que llevaba en el norte de Irak. Se roció con gasolina y se prendió fuego, sufriendo quemaduras en el 91% de su cuerpo. Ahora se encuentra en estado crítico en el hospital.
"Tienen que ayudarme. No tenemos trabajo, ni dinero y nuestra única esperanza es la ONU y la ONU no nos responde. Es nuestro derecho", dijo Mahmoudi al portal de noticias Rudaw.
Añadió que ya había pedido ayuda al Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR), pero que no se la habían ofrecido.
En una declaración a Rudaw, un portavoz de la misión de la ONU en Irak (UNAMI) dijo que están "conmocionados y entristecidos por todo el incidente y, en nombre de la familia de las Naciones Unidas en Irak, desean al joven una pronta recuperación".