Una fuente de seguridad israelí reveló ayer que las fuerzas de ocupación han dejado cerrados los cruces de Karm Abu Salem y Beit Hanoun (Erez) como parte de una nueva política de trato con la Franja de Gaza, informaron las agencias de noticias.

La fuente de seguridad israelí informó que los dos cruces permanecerán cerrados hasta nuevo aviso, señalando que las autoridades de ocupación han estado bloqueando la entrada de cualquier alimento u otros bienes comerciales a Gaza.

Según la fuente, también se está impidiendo la entrada a la Franja asediada de personas y de los cuerpos de los fallecidos que están recibiendo tratamiento en hospitales israelíes.

Mientras tanto, el ministro de Defensa israelí, Benny Gantz, declaró, según Anadolu, que la reconstrucción de la Franja de Gaza está condicionada a que se llegue a un acuerdo sobre la devolución de los soldados israelíes desaparecidos.

"Debemos condicionar el desarrollo y la reconstrucción [en Gaza] no sólo a la calma, sino también a la devolución de los cuerpos de los soldados y de los civiles retenidos como rehenes en Gaza", dijo Gantz en una entrevista con Kan.

Gantz dijo que, tras la reciente ofensiva israelí en Gaza, ahora había una oportunidad de avanzar en la cuestión de los soldados israelíes desaparecidos.

El viernes entró en vigor un alto el fuego mediado por Egipto entre los grupos de resistencia palestinos e Israel, que puso fin a 11 días de combates.

Sin embargo, Gantz dijo que los altos dirigentes de Hamás, incluido el jefe del ala política del grupo en Gaza, Yahya Sinwar, y el comandante del ala militar del grupo, Mohammad Deif, seguían siendo objetivos por eliminar.

Al menos 279 palestinos murieron, entre ellos 69 niños y 40 mujeres, y otros 1.910 resultaron heridos en los ataques israelíes contra la Franja de Gaza, según el Ministerio de Sanidad palestino.

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