El jefe del comité organizador de la Copa del Mundo 2022 de Qatar ha declarado que las condiciones de los trabajadores inmigrantes mal pagados han mejorado, pero que es necesario seguir trabajando y que el Estado árabe del Golfo se ha comprometido a hacerlo, informa Reuters.
Qatar se ha enfrentado a un gran escrutinio internacional sobre el trato a los trabajadores desde que ganó los derechos en 2010 para organizar la primera Copa del Mundo en Oriente Medio.
Sin embargo, Qatar ha introducido varias reformas laborales desde 2010 que, según dice, han beneficiado a los trabajadores, como el aumento del salario mínimo el año pasado a 275 dólares al mes y la eliminación de los obstáculos para cambiar de empleador.
"Tenemos la firme convicción de que todas las personas que viven en Qatar o que contribuyen a su desarrollo son tratadas con dignidad. Su salud y seguridad son nuestra mayor preocupación", declaró el Secretario General del Comité Supremo para la Entrega y el Legado, Hassan Al Thawadi, en el Foro Económico de Qatar virtual.
"Hoy en día no hay ninguna nación en el mundo que pueda afirmar que tiene el sistema laboral perfecto o el régimen de bienestar de los trabajadores perfecto, y nosotros no somos diferentes. Hay que avanzar, hay que trabajar más".
El compromiso de Qatar de mejorar el bienestar de los trabajadores continuará más allá del campeonato del año que viene, dijo.
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En marzo, los jugadores de las selecciones nacionales de fútbol de Alemania, Holanda y Noruega lucieron camisetas antes de los partidos de clasificación para el Mundial en las que expresaban su preocupación por los derechos humanos en Qatar, después de que el periódico británico The Guardian dijera que había calculado la muerte de al menos 6.500 trabajadores inmigrantes en Qatar desde que obtuvo los derechos de organización.
Qatar había dicho que las muertes registradas estaban dentro del rango esperado para el tamaño y la demografía de la población de los trabajadores afectados, y que la tasa de mortalidad había disminuido constantemente desde 2010 debido a las reformas de salud y seguridad.
Se espera que la Copa del Mundo aporte unos 20.000 millones de dólares a la economía, de los que una parte importante beneficiará a los sectores de la construcción y el turismo, dijo Al Thawadi.
Qatar ha gastado miles de millones de dólares en la renovación y construcción de estadios, además de otros grandes proyectos de infraestructura en la última década.
El torneo se celebrará del 21 de noviembre al 18 de diciembre del próximo año.
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