El gigante energético BP, que ha invertido más de 500 millones de dólares en Turquía en los últimos tres años, quiere centrarse en las energías renovables en el país, informa el periódico local Sabah.
Turquía pretende librarse de los grilletes impuestos por las importaciones de energía gracias al gas natural que se encuentra en el Mar Negro - Viñeta [Sabaaneh/MiddleEastMonitor].
La expansión de las energías renovables en Turquía en la era post COVID, impulsada por las energías hidráulica, eólica y solar, ha situado a la provincia occidental de Izmir como líder en energía eólica y a la provincia central de Anatolia, Konya, como pionera en energía solar.
Al afirmar el enorme potencial de las energías renovables en Turquía, Isiltan dijo: "Esta situación coincide con nuestro objetivo de ser una empresa de energía con cero emisiones hasta 2050 o antes. Especialmente teniendo en cuenta el gran potencial de la energía solar y eólica, las condiciones en este campo son consideradas".
"Queremos participar en la medida de lo posible. Por otro lado, continuaremos con nuestras iniciativas en las zonas de gasoductos del Corredor del Sur (TANAP)", añadió.
BP ha estado dirigiendo el 12% de la construcción del gasoducto de TANAP.
Turquía se propone obtener dos tercios de la electricidad a partir de energías renovables para 2023.
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