Ben and Jerry's anunció ayer que "pondrá fin a la venta de helados en los Territorios Palestinos Ocupados", en otra importante victoria del movimiento de Boicot, Desinversión y Sanciones (BDS).
En un comunicado publicado en su portal web, la empresa dijo: "Creemos que es incompatible con nuestros valores que los helados de Ben & Jerry's se vendan en el Territorio Palestino Ocupado (TPO). También escuchamos y reconocemos las preocupaciones que comparten con nosotros nuestros fans y socios de confianza."
La decisión no tendrá efecto inmediato, dijo la compañía, ya que debe cumplir con los contratos existentes, sin embargo "no renovaremos el acuerdo de licencia cuando expire a finales del próximo año."
Ben and Jerry's seguirá vendiéndose en Israel.
La empresa ha sido objeto de la campaña de boicot durante años, después de que en 2011, Vermonters for a Just Peace in Palestine/Israel (VTJP) iniciara una disputa con Ben & Jerry's en South Burlington, Vermont, en relación con su larga relación contractual con una franquicia israelí que fabrica helados en el propio Israel y los vende en los asentamientos israelíes en la Cisjordania ocupada y Jerusalén Este.
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Desde 2013, miles de personas y 239 organizaciones de 20 países, incluido Israel, y del Distrito de Columbia y los territorios palestinos ocupados, pidieron a Ben & Jerry's que cumpliera su Misión Social cortando los negocios de su franquicia con los asentamientos israelíes.
La empresa afirma claramente en su portal web que cree en "utilizar nuestro negocio para hacer del mundo un lugar mejor", incluso a través de un compromiso "para honrar los derechos de todas las personas a vivir con libertad, seguridad, autoestima y libertad de expresión y protesta" y "lograr la equidad, la oportunidad y la justicia para las comunidades de todo el mundo que han sido históricamente marginadas".
Cuando Jeff Furman, presidente del Consejo de Administración de Ben & Jerry's, viajó a la Palestina ocupada en 2012 con un grupo de líderes de los derechos civiles estadounidenses. Describió lo que vio allí como "apartheid", sin embargo nada cambió en la política de la empresa.
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