El periodista marroquí detenido Suleiman Raissouni ha entrado en su 112º día de huelga de hambre, según informaron el miércoles los medios de comunicación locales.
La esposa de Raissouni, Kholoud Mokhtari, publicó en Facebook que el estado de salud de su marido se estaba "deteriorando".
El activista de los derechos humanos comenzó su huelga de hambre el 8 de abril para protestar por su continua detención preventiva, que dura más de un año.
"Espero que dejes tu huelga de hambre. Eres un héroe a mis ojos y a los de aquellos que defienden la dignidad de este país", añadió Mokhtari.
Mokhtari añadió en otro post de Facebook el martes que Raissouni le dijo durante una llamada telefónica que: "Algunos de los presos fueron asignados por las autoridades para espiarlo". "Mi marido bajó las escaleras arrastrándose con la ayuda de una bolsa de plástico para reunirse con su abogado porque no le permiten usar una silla de ruedas", señaló Mokhtari.
En respuesta, el jefe de la Delegación General de la Administración Penitenciaria y de Reinserción de Marruecos (DGAPR) negó las acusaciones de Mokhtari, subrayando que Raissouni estaba acompañado por personal médico, y que se había negado a visitar el hospital. Reiteró que no había mantenido ninguna llamada telefónica con su esposa.
El 10 de julio, un tribunal de Casablanca condenó a Raissouni a cinco años de prisión por "atentado violento al pudor y detención", acusación que él niega.
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