El secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, dijo el jueves que el proceso de negociación con Irán para revivir un acuerdo nuclear de 2015 no podía continuar indefinidamente, y que la pelota está en el campo de Teherán, informó Reuters.
Las conversaciones indirectas entre Teherán y Washington para revivir el pacto nuclear, del que el entonces presidente Donald Trump retiró a Estados Unidos en 2018, se suspendieron el 20 de junio, dos días después de que el clérigo de línea dura Ebrahim Raisi fuera elegido presidente de la República Islámica. Raisi asume el cargo el 5 de agosto.
Las partes implicadas en las negociaciones, entre las que también se encuentran China, Rusia, Francia, Gran Bretaña, Alemania y la Unión Europea, aún no han dicho cuándo podrían reanudarse.
"Estamos comprometidos con la diplomacia, pero este proceso no puede durar indefinidamente", dijo Blinken en una conferencia de prensa en Kuwait.
"En algún momento, los logros alcanzados por el JCPOA (Plan de Acción Integral Conjunto) no podrán ser recuperados en su totalidad por un retorno al JCPOA si Irán continúa con las actividades que ha emprendido con respecto a su programa nuclear", dijo.
"Hemos demostrado claramente nuestra buena fe y nuestro deseo de volver al cumplimiento mutuo del acuerdo nuclear... La pelota sigue estando en el tejado de Irán y veremos si están preparados para tomar las decisiones necesarias para volver al cumplimiento".
El líder supremo, el ayatolá Alí Jamenei, que tiene la última palabra en los asuntos de Estado de Irán, declaró el miércoles que Teherán no aceptaría las "obstinadas" exigencias de Washington en las conversaciones nucleares y volvió a rechazar rotundamente que se añadan otras cuestiones al acuerdo.
Los Estados árabes del Golfo han pedido que se les incluya en las negociaciones y que cualquier acuerdo aborde lo que ellos llaman el programa de misiles balísticos de Irán y su comportamiento desestabilizador en la región.
Blinken también dijo que había discutido durante su visita a Kuwait, donde se reunió con el emir gobernante, el tema de la reubicación de los intérpretes afganos.
Muchos afganos que trabajaron con las fuerzas de la OTAN temen las represalias de los insurgentes talibanes islamistas cuando las tropas estadounidenses se marchen.
Estados Unidos utiliza varias bases militares en Kuwait, con el que mantiene fuertes relaciones tras liderar una coalición que puso fin a la ocupación iraquí del estado del Golfo en 1990-91.
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