Egipto pidió el domingo a los tunecinos que evitaran la escalada y la violencia en medio de la tensión tras la destitución del gobierno por el presidente del país y la suspensión del parlamento, informa la Agencia Anadolu.
La semana pasada, el presidente tunecino Kais Saied destituyó al gobierno del primer ministro Hichem Mechichi, congeló el parlamento y asumió la autoridad ejecutiva con la ayuda de un nuevo primer ministro.
El presidente tunecino insiste en que sus medidas excepcionales pretenden "salvar" al país, mientras que sus críticos le acusan de orquestar un golpe de Estado.
"Egipto sigue de cerca el desarrollo de los acontecimientos en Túnez y expresa su plena solidaridad con el hermano pueblo tunecino y sus legítimas aspiraciones", dijo el Ministerio de Asuntos Exteriores egipcio en un comunicado.
Subrayó "la necesidad de evitar la escalada y abstenerse de la violencia contra las instituciones del Estado para preservar los logros y las capacidades del hermano pueblo tunecino".
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El comunicado expresa la esperanza de Egipto de que los tunecinos superen sus desafíos y "avancen hacia la construcción de un futuro mejor".
Egipto "confía en la sabiduría y la capacidad de la Presidencia tunecina para sacar al país de esta crisis lo antes posible".
Túnez está considerado como el único país que logró llevar a cabo una transición democrática entre un grupo de países árabes que fueron testigos de revoluciones populares que derrocaron a sus regímenes gobernantes, entre ellos Egipto, Libia y Yemen.
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